¿Por qué han saltado las alarmas en el fútbol español en las últimas semanas? ¿Qué genera tanta preocupación que les haya llevado a pensar llegar incluso a pensar en un parón de la patronal o la huelga?. Como os venimos contando en Mundo Deportivo, todo surge en la futura nueva Ley del Deporte, que está actualmente en fase de tramitación, y que viene a sustituir a la vigente desde 1990.
En este futuro texto hay tres apartados que han puesto en alerta a LaLiga española porque pone en peligro la viabilidad de la competición profesional española. La primera, y más importante, viene como consecuencia de la retirada de las enmiendas que en su día presentaron tanto el PSOE como PP, a este nuevo texto legal respecto a nuevas competiciones ajenas a las actuales.
Porque esta retirada afecta a la línea de flotación de la competición profesional dado que entienden facilita la proliferación de proyectos externos, como puede ser el proyecto de Superliga europea, que tanto daño puede hacer a la competición española. La enmienda retirada habilita ahora que se le pueda tramitar la licencia a un club que participe en una competición fuera de la UEFA y la FIFA, como es el caso de la futura Superliga que lidera el Real Madrid junto al Barcelona. Esto entiende la patronal y la gran parte de los clubes que es una amenaza para la competición española.
Ayer mismo Manuel Vizcaíno, presidente del Cádiz y miembro de la Comisión delegada de Laliga que estuvo presente en la reunión del pasado lunes con el gobierno, lo dejó claro antes del encuentro ante el Betis: “Los dos partidos políticos más importantes en España, PP y PSOE, se han puesto de acuerdo para ir en una línea totalmente contraria a lo que pensamos los clubes de LaLiga, y lucharemos por nuestros intereses. No vamos a permitir que se cambie el estatus y haremos lo que haga falta. Entre otras cosas, porque es bueno para todos. Somos el 1.4 del PIB nacional, generamos 250.000 puestos de trabajo… no vamos a permitir que se pierdan puestos de trabajos y volvamos para atrás en beneficio de uno o dos clubes cuando somos 39 o 40 que pensamos de una forma”. Es decir, 39 o 40 de los 42 clubes de la Liga se alinean en la postura de su presidente Javier Tebas de la amenaza de la Superliga para la competición española. Y la enmienda anterior impedía a los dos grandes poder participar en la Liga española si juegan en este competición al margen de la UEFA.
Manuel Vizcaíno también este otro mensaje al respecto y consensuado por todos los presidentes : “Lo único que debe cambiar es para que afiancemos una manera de trabajar en la que creemos de forma mayoritaria unos clubes de LaLiga y que ha afianzado una Liga reconocible en el mundo entero y en la cual todos los clubes de Primera y Segunda son rentables. Cambiar ese estatus a incertidumbre hará que 30 o 40 clubes de la Liga vuelvan a tener dificultades como hace doce o catorce años y no se puede permitir”
La explotación de los derechos comerciales
La segunda gran preocupación en el seno de los clubes radica en la falta de seguridad jurídica en la explotación comercial de los bienes y derechos de LaLiga. Si la ley se aprueba con el texto que se encuentra actualmente en tramitación parlamentaria, la seguridad jurídica que se pretendía dotar con la nueva Ley a la explotación comercial de los bienes y derechos de LaLiga y los miembros de su organización desaparece y, por lo tanto, la inseguridad jurídica se mantiene o incluso se aumenta. Algo por ejemplo que podría afectar al acuerdo actual con CVC a la revisión de los contratos que tiene suscritos con la patronal. Explotación comercial que si reconoce en el caso de las federaciones nacionales.
La RFEF no tiene porque consultar con las ligas profesionales
Y el tercer asunto capital tiene carácter normativo. Inicialmente la nueva ley del deporte mantenía la redacción actual según la cual la RFEF no puede introducir modificaciones normativas que afecten a las ligas profesionales sin el informe previo y favorable de ésta. La retirada de la enmienda, si no es revertida, puede dar pie a un mayor conflicto entre ambos organismos porque habilitaría a la RFEF poder llevar a cabo modificaciones sin contar con la aprobación de la patronal. Y uno de los apartados afectados sería por ejemplo los horarios de los partidos y que ahora mismo LaLiga puede fijar tras la resolución del CSD de octubre del 2020.
El jueves próximo será cuando la Comisión Delegada traslade a los clubes las conclusiones de la reunión con el Ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta. Será en la misma donde se fije la hoja de ruta que adoptaran los clubes. Desde ayer mismo, con el mensaje de los presidentes como Manuel Vizcaíno, han dejado claro que van a luchar hasta al final por la defensa de sus intereses. De momento con el diálogo pero no descartan llegar a la huelga o el llamado parón de la patronal.