Navarra registró el domingo 546 nuevos casos de covid-19, 83 más que la cifra récord que el viernes obligó al Gobierno de la comunidad a adoptar nuevas restricciones. Es la primera vez en lo que va de pandemia que Navarra supera el listón de los 500 casos por 100.000 habitantes en dos semanas. La presidenta, María Chivite, calificó el domingo la situación de “crítica” y este lunes ha justificado las restricciones que entrarán en vigor el martes porque de nuevo las cifras “vuelven a ser las peores”. “Nos damos dos semanas para mejorar la situación”, ha dicho en una entrevista en la cadena SER, tras explicar que las principales limitaciones son para el sector de la hostelería y justificar que no han reducido la movilidad, pero tampoco descartan hacerlo si estas medidas son insuficientes.
En las últimas 24 horas, el sistema navarro de salud ha registrado 27 nuevos ingresos hospitalarios, ninguno de ellos en UCI. Actualmente, están ingresados 281 pacientes en los hospitales navarros y 34 de ellos se encuentran en unidades de cuidados intensivos. Unas cifras que, de momento, mantienen el índice de ocupación en camas de críticos por debajo del 25% cuando el Gobierno establece en más del 35% el límite para estudiar medidas más radicales. El sábado el director general de Salud, Carlos Artundo, pidió a los navarros que “prácticamente se autoconfinen” después de conocer que los nuevos positivos ascendían a 463 nuevos casos, frente a los 449 del jueves y a los 400 del miércoles. Navarra se convirtió en la comunidad autónoma con mayor incidencia acumulada del virus, 675 casos por cada 100.000 habitantes según el informe del Ministerio de Sanidad del viernes, casi el triple que la media española.
La presidenta María Chivite ha explicado este lunes en Hoy por Hoy que, pese al elevado número de nuevos positivos, que inicialmente estimó en unos seiscientos, aunque al final han sido menos, su Ejecutivo “no se ha planteado” las limitaciones de movilidad. “Ni nosotros ni el ministerio”, ha puntualizado. “Tenemos los peores datos de todos los días de la pandemia. Esto ratifica que las medidas que tomamos ayer son las correctas”, señalaba Chivite, quien indicaba que el jueves contactaron con el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias para valorar las medidas a aplicar.
Sobre una posible petición del estado de alarma, Chivite dudaba de su utilidad en estos momentos. “Por ahora no sé qué cubriría el estado de alarma que no hayamos hecho hasta ahora. Los jueces han ratificado cada una de las medidas que hemos tomado”, explica. Asimismo, considera que el estado de alarma debería aplicarse en caso de que fuera necesario confinar a la población, una medida que confiesa que es la “última” a la que se quiere llegar.
Las medidas que entran en vigor a las 00.00 del martes prevén el cierre de los locales de hostelería a las 22.00 horas y la reducción del aforo al 30% en interiores y al 50% en exteriores y zonas abiertas. Se limita a seis el número de personas en reuniones públicas y privadas y se cierran las sociedades gastronómicas y txokos, para eliminar el riesgo de contagios en los locales privados en los que muchas cuadrillas de amigos, de todas las edades, hacen vida social. De los nuevos casos, el 59% corresponden a menores de 45 años, y solo el 19% a los de más de 60.
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