La Real llevaba dos años siguiendo a Cristian
Portugués ‘Portu’ (Beniel, 1992) y no ha sido hasta este verano cuando verdaderamente pujó por él. Tras el descenso del Girona, la cláusula del murciano bajó de 20 a 10 millones, cifra asequible y justa para un jugador de sus características. La Real no se lo pensó y realizó su inversión más cara del verano. Tras casi tres meses de competición, el delantero ha demostrado porqué el club hizo tal esfuerzo.
Y es que la Real no tenía un delantero con esas cualidades. El extremo se ha ganado a la afición a base de desfogarse cada vez que se ha puesto la txuri urdin. Su capacidad de gol, ya la teníamos vista. En sus dos temporadas en Primera con el conjunto gerundense marcó un total de 20 goles, 11 en la campaña de su debut y nueve en la segunda, cifras más que dignas para un delantero secundario que aporta bastante más que gol.
Pero es que en la Real está desarrollando otras virtudes nunca vistas en él. Portu es el máximo asistente de la Liga con tres pases de gol empatado con Capa, Ángel
Montoro, Rodrigo y Cazorla, Arthur y Carvajal y sólo Arthur lo ha hecho en menos tiempo. El realista sólo ha necesitado 458 minutos para colocarse como segundo en esta estadística mientras que el azulgrana ha necesitado hora y media menos.
Un delantero total
El nuevo ‘7’ de la Real no pudo jugar en la primera jornada por lesión y debutó en la segunda ante el Mallorca. Sustituyó a Januzaj en el 62’ y solo necesitó 21 minutos para envolver el primer regalo. Fue él quien le dio el magnífico pase de gol a Odegaard tras una contra perfecta de Moyá. El noruego controló el envío y lo metió en la red para que la Real consiguiese los primeros tres puntos de la temporada.
Su segunda asistencia tardó algo más en llegar. Fue en Cornellà ante el Espanyol y también fue clave para otra victoria de la Real. Portu realizó un desmarque al espacio, se plantó delante de Diego
López y con algo de suerte, sirvió en bandeja el gol a Willian
José, que remachó sin oposición para poner el 0-2 y tierra de por medio.
La última, en cambio, tiene un sabor algo más agridulce. Portu fue el encargado de culminar otra obra de arte txuri urdin ante el Getafe. La acción comenzó justo en el lado opuesto. Monreal sacó de banda a Merino, que con un control orientado con el pecho se zafó del defensor para abrir el juego a la derecha y encontrar el espacio. El balón llego a Portu, que con un centro medido, tocado y preciso la puso perfecta para que Merino en plancha hiciese el primero de la tarde. Una pena que no acabase con el premio de los tres puntos. En todo caso, siete partidos jugados son suficientes para afirmar que la Real ha encontrado en Portu un delantero total. Está en modo ‘playmaker’.
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