Las aerolíneas están evaluando el daño y sosteniendo reuniones con Boeing sobre una posible compensación por haber dejado de utilizar el problemático avión 737 Max de la compañía.
El jueves, dos de las aerolíneas más grandes de Estados Unidos que tienen aviones Max en su flota actualizaron sus estimaciones sobre cómo el avión afectó sus ingresos.
American Airlines señaló que sus ganancias de 2019 se verán reducidas por 400 millones de dólares, 50 millones más que su estimado anterior. En tanto, Southwest Airlines anunció que debido a que se quedó con menos aviones tras dejar de utilizar el Max, pondrá fin a sus servicios en el aeropuerto de Newark, en Nueva Jersey.
Southwest eliminó el avión de su programa hasta principios de enero, dos meses después de que American hizo lo mismo, para permitir una recapacitación de los pilotos y evitar problemas a los viajeros de la temporada navideña.
Los ejecutivos de la aerolínea, sin embargo, respaldan al avión y apuestan a que los pasajeros volverán a subirse en él. El Max se dejó de utilizar desde marzo, después de que estuvo involucrado en dos accidentes que provocaron la muerte de 346 personas.
El presidente y director general de American Airlines, Doug Parker, dijo que una vez que la Administración Federal de Aviación apruebe los cambios que Boeing le hizo al avión y los pilotos se sientan cómodos y lo suficientemente capacitados para volar, eso “marcará la diferencia en la actitud de los consumidores sobre la aeronave”.
Esta semana, Boeing reportó la pérdida más grande en un trimestre que ha tenido, de casi 3,000 millones de dólares, luego de disponer 5.600 millones para compensar a sus clientes.
El director general de Boeing, Dennis Muilenburg, dijo que espera que el Max vuelva a estar operando en octubre, luego de que la compañía termine unas actualizaciones al software en septiembre. Las previsiones anteriores de Boeing han sido demasiado optimistas, aunque Muilenburg admitió que existe el riesgo de que se encuentren más problemas en el avión.
Cuando la aeronave fue ordenada a mantenerse en tierra en marzo, Southwest era propietaria de 34 de ellas, la mayor cantidad de las docenas de aerolíneas que usaban el avión. Eso representa casi un 5% de la flota de Southwest y 8% de la capacidad de transporte de pasajeros de la aerolínea.
Sin esos aviones, Southwest ha cancelado alrededor de 180 vuelos al día desde el 5 de enero, casi 5% de su programa, y tomó la acción inusual de disminuir sus operaciones en lugar de aumentar su capacidad de transporte de pasajeros.
American Airlines, que tenía 24 aviones Max, cancela alrededor de 115 vuelos al día hasta el 2 de noviembre, debido a que dejó de utilizar el modelo. Los ejecutivos de la aerolínea dijeron que las reservaciones de última hora se redujeron durante más de un mes luego de que dejaron de utilizar el Max debido a que los viajeros de negocios temían quedar varados por una cancelación. La compañía dijo que el problema con el Max le arrebató 175 millones de sus ganancias del segundo trimestre.