Sin presente no hay futuro, más cuando el fútbol femenino aspira, por fin, a quedarse. ¿Dónde? Al lado del masculino, recorriendo un camino paralelo que para ellas se ha hecho demasiado largo. La meta no es otra que equiparar una y otra categoría. Ni más, ni menos. También entre quienes han de formar los futuros equipos de la Liga Iberdrola: las alevines sub12. Una apuesta por el fútbol base femenino, imprescindible para escribir un futuro lleno de talento.
No hace muchos años, no eran pocas las niñas que jugaban a fútbol y que tuvieron que empezar a competir en equipos de niños. Algunas, sencillamente, eran las únicas chicas que jugaban en su colegio, en su pueblo. La mayoría nunca pudo disfrutar de torneos femeninos, al revés que sus compañeros. El fútbol femenino apenas contaba con estructuras, recursos, apoyo y, por descontado, visibilidad, pero por suerte sí contaba con su tenacidad, esfuerzo y perseverancia.
Hoy estas jóvenes ven con orgullo cómo las nuevas generaciones van a poder disfrutar del ‘I Torneo Nacional Femenino LaLiga Promises’ organizado por LaLiga con el respaldo de la Real Federación Gallega de Fútbol. Un campeonato consolidado en su versión masculina y que, por fin, ha encontrado la réplica justa y necesaria: la femenina. El torneo sub12 más importante del mundo se jugará entre hoy y el 23 de junio en Abengondo, la Ciudad Deportiva del Deportivo de La Coruña, con ellas también como protagonistas.
Durante tres días, las canteras de 14 equipos de fútbol femenino de España se darán cita en la primera edición de este torneo. Son Athletic Club, RCD Espanyol, Atlético de Madrid, Sevilla FC, RC Deportivo de la Coruña, R. Betis Balompié, Levante UD, Rayo Vallecano, Fundación Albacete, Sporting Club de Huelva, Málaga CF, VCF Femenino, Madrid CFF y UD Granadilla. Sus jugadoras apenas tienen 12 años pero este fin de semana van a formar parte de algo histórico. Un paso más hacia la equidad e igualdad y donde de alguna manera u otra se rinde homenaje a todas aquellas niñas que alguna vez jugaron o sencillamente soñaron jugar, sin diferencias, ni horarios intempestivos, ni después de nadie. Solo ellas.
Cristina Sánchez es directora de Activación Corporativa de Marca de LaLiga, el departamento que está detrás. “Veníamos pensando en ellas desde hace dos o tres temporadas y el año pasado dimos el pistoletazo de salida. Dijimos: de esta temporada no pasa”, explica. El departamento de Sánchez también ha organizado LaLiga Promises masculina que, de la mano de la Fundación José Ramón de la Morena, se ha convertido en un producto audiovisual muy potente.
Sánchez comparte que, a diferencia de los alevines masculinos, el fútbol base femenino está todavía en desarrollo, motivo por el que este torneo puede suponer un punto de inflexión y un impulso. “Algunas canteras aún están en desarrollo, pero hay otras muchas que cuentan con un gran nivel. Hay una masa crítica de calidad como para hacer un buen torneo”, comparte. Por delante, todo por jugar entre quienes más ganas tienen. Lo harán, eso sí, “con los mismos tratamientos, reglamento, condiciones y recursos”.
El foco de la normalización
Una igualdad que ilustra la apuesta de LaLiga por la normalización. “Lo mismo que hacemos con los chicos lo hacemos con ellas. El objetivo es no distinguir. Toda la organización está volcada y queremos que sea un torneo con la misma solera y tradición que su versión masculina”, comparte Pedro Malabia, director del Área de Fútbol Femenino de LaLiga. Que sea retransmitido, sin duda, ayudará. “Es importante para ellas, porque no todas han tenido la suerte de jugar y verse en televisión”, valora.
En concreto, el torneo podrá seguirse por Gol Televisión y LaLigaSportsTV, que harán posible un fin de semana televisivo único, especialmente si tenemos en cuenta que GOL TV también televisa los partidos del Mundial de Francia. Así, tras los octavos de final de esta competición, se retransmitirán los cuartos de final de LaLiga Promises, algo que dará aún más impulso a su visibilización.
Este torneo es una realidad gracias a LaLiga en colaboración con la Real Federación Gallega de Fútbol. Su director técnico, Manuel Fernández, ha asumido el reto de llevar adelante este primer campeonato como parte de la propia organización. Alojamientos, recursos, instalaciones, todo debe estar preparado para dar cabida a una de las novedades del año (y de muchos años). “Para nosotros es muy importante porque a nivel nacional hay una eclosión del fútbol femenino y la visibilidad es mucho mayor”, destaca.
Fuera del campo el objetivo es común: que los equipos queden satisfechos y lo vivan con ilusión. “Como Federación queremos demostrar que estamos a la altura de un campeonato nacional, queremos que el público disfrute del evento y del fútbol femenino”, añade. Una visibilidad que también hará posible que “las niñas se vean reflejadas en otras niñas” y que, sin duda, potenciará su capacidad de organización. “Que podemos albergar eventos de este tipo”, afirma.
Otra de las piezas indispensables en esta aventura es la del Real Club Deportivo de La Coruña. Pablo Pereiro es gerente del club, que ejerce de anfitrión en el torneo. Un papel que asumen ‘encantados’ y que se alinea con su ilusión de ser referente del fútbol femenino en Galicia y otras regiones (León, Asturias…) catalizando el talento que emerge en esas zonas. Una apuesta que ha tenido recompensa pues en solo tres años de trayectoria, el femenino ha ascendido a la Liga Iberdrola.
Un ascenso de récord -no han perdido ni un partido, solo empatado- y donde su papel como anfitrión en la celebración de la primera edición del Torneo Nacional Femenino LaLiga Promises rubrica un final de temporada en el que solo puede mostrarse orgulloso. “El torneo es un valor añadido más. Que niñas sub12 vengan a la Ciudad Deportiva a competir no solo es bonito, es visible, y estamos encantados”, explica.
En el terreno, la última pieza. La más vital. Ellas, que han seguido el camino de jugadoras que lucharon aun sin referentes. Como María Bernal, jugadora del Real Betis Féminas y preparadora física de las alevines que este fin de semana juegan contra otros 13 equipos. Para ella, es un paso adelante que da el fútbol femenino en su versión menuda. “No solo se está presenciando en categorías más altas sino que se intenta que el fútbol crezca desde la base”, valora.
A las puertas, un fin de semana en el que cualquier resultado sabrá a victoria, independientemente de quién se alce con el triunfo. “Lo importante para que todo salga bien es que las niñas estén ilusionadas, que los entrenadores mostremos lo que hemos trabajado durante años, y que esto se vea reflejado en sus ganas”. Porque, tal y como destaca Bernal, federaciones, clubes y medios de comunicación se han dado cuenta de que si el camino se inicia desde la cantera, sin duda, llegarán más lejos.
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