Hace muchos años que el Espanyol no gana en el Bernabéu, concretamente 24 años, cuando un doblete de Lardín certificó el triunfo perico (1-2) en Chamartín. Pero ya no es tan lejano ni excepcional, que el equipo blanquiazul puntúe en feudo merengue, pese a que la gran mayoría de visitas se hayan saldado con derrotas.
El Espanyol arañó sendos empates (2-2) en la última década. El último se dio hace siete años, en la Liga 2012-13, cuando el conjunto dirigido por Javier Aguirre se llevó un punto in extremis, dejando al Madrid de Jose Mourinho muy tocado. En aquel partido del Bernabéu del 16 de diciembre de 2012, jugado también en la jornada décimo sexta como la de mañana y con el Espanyol también penúltimo de la clasificación, se avanzó Sergio García, remontaron Cristiano y Coentrao, pero Albín dio la puntilla en el 88’ firmando el segundo gol perico, un empate de oro.
No es el único precedente cercano pues el Espanyol también sacó tajada de Chamartín hace 11 años. En la Liga 2008-09, en la sexta jornada, también se dio un 2-2 con goles de Tamudo y Luis García con ‘Tintín’ Márquez en el banquillo.
Volviendo al presente, pese a reconocer la tremenda dificultad de medirse a un Madrid al alza, el vestuario de Machín se ve con capacidad para dar la sorpresa. Esteban Granero, uno de los pesos pesados del equipo, aseguró ayer que no van con temor a Madrid.
“No pensamos que vamos al matadero ni nada parecido. Vamos con toda la ilusión a por los tres puntos, que son muy importantes”, dijo ‘El Pirata’. Tiene muy claro que para puntuar “debemos dar nuestra mejor versión, con concentración y acierto. Y después no dudar, es fundamental, ir sin miedo y competir como sabemos”.
Insistió en que “confiamos en nuestras posibilidades de victoria. Al Madrid le ganamos hace muy poco en Cornellà-El Prat y no creo que difiera tanto de jugar en un campo u otro. Me gustaría que los aficionados también crean que se puede”.
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