El guardia keniano John Njue Kibue murió en el hospital tres días después de sufrir una caída en el Estadio Lusail del Mundial Qatar 2022, según confirmó la familia del fallecido a la cadena CNN. Más tarde, la organización confirmó el fallecimiento.
Según el canal estadounidense, Kibue, de 24 años, se precipitó sufrió una caída desde el octavo piso del recinto durante su jornada laboral. El joven fue ingresado de inmediato en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital General Hamad en Doha, con “lesiones graves en la cabeza, fracturas faciales y fracturas pélvicas”, tal como se declara en el certificado médico obtenido por CNN.
BREAKING: a Kenyan security guard identified as JOHN NJUE KIBUE, 24, has passed away while in ICU after suffering a serious fall while on duty at the Lusail Stadium here in Doha. CNN say Njue had “serious head injuries, facial fractures and pelvic fractures.”#FIFAWorldCup pic.twitter.com/YnNAFTbtB6
— Eric Njiru (@EricNjiiru) December 14, 2022
La organización del Mundial informó el sábado el incidente en un comunicado, en el que afirmaba que el guardia “sufrió una caída grave mientras estaba de servicio”. La declaración agregó que Qatar está “investigando con carácter de urgencia las circunstancias” en las que se produjo la caída.
Tres días después, se confirmó el fallecimiento de Kibue.
Lamentamos anunciar que, a pesar de los esfuerzos del equipo médico, falleció en el hospital el martes 13 de diciembre tras permanecer tres días en la unidad de cuidados intensivos.
Es el segundo trabajador migrante que quiere durante la celebración del torneo, después de que un empleado filipino falleciera tras un accidente durante obras de reparación en el hotel del equipo de la selección de Arabia Saudita.
Además, se une a la muerte del periodista estadounidense Gran Wahl, que falleció la semana pasada mientras cubría el partido de cuartos de final entre Argentina y Países Bajos. La causa oficial del fallecimiento no ha sido compartida al momento, aunque The Wall Street Jorunal sostiene que aparentemente sufrió un ataque al corazón.
Tras conocerse la noticia, su hermano denunció en Instagram que el periodista deportivo podría haber sido asesinado, ya que día antes fue abordado por las autoridad de Doha por llevar una camiseta arcoíris en apoyo a la comunidad LGBTQI+.
(Con información de Europa Press)