Una seguidora de Irán se presentó al Estadio Ahmed bin Ali, durante el partido entre los ‘Príncipes de Persia’ y Gales, pintada con lágrimas de sangre y con una camiseta de Mahsa Amini para manifestarse por los derechos de las mujeres en el país asiático, hasta que apareció la policía local y le retiró la camiseta.
Mahsa Amini murió el pasado mes de septiembre a manos de la policía moral, tras ser detenido por no tener bien colocado su hijab, y su fallecimiento desató uno de los movimientos civiles más fuertes de la historia del país.
La Selección de Irán se manifestó en contra del gobierno de Ebrahim Raisi al no cantar el himno de su país antes del partido ante Inglaterra.
El movimiento civil que surgió tras la muerte de Mahsa es considerado por las autoridades iraníes como una amenaza para la seguridad nacional. En las últimas 9 semanas de protestas, más de 416 personas han fallecido, entre ellas 51 menores de edad, según datos de la ONG Iran Human Rights (IRH).
(Con información de FoxSports en Qatar)
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