Las manchas solares en la cara son un problema relativamente común entre las mujeres, sobre todo en verano. Estos son los diferentes tipos que existen.
Léntigos
Los léntigos son las manchas solares en la cara que ocurren con más frecuencia. Su aspecto es similar al de unas pecas de gran tamaño, y por suerte el tratamiento es sencillo ya que se eliminan muy bien con láser.
Hiperpigmentación postinflamatoria
Estas manchas son muy frecuentes durante la época estival por la exposición al sol de zonas inflamadas después de la depilación o con alguna herida, por ejemplo. El peeling es uno de los tratamientos más efectivos.
Melasma
El melasma aparece comúnmente en personas con fototipos III y IV. Su origen es hormonal, así que afectan generalmente a mujeres embarazadas o menopáusicas. Se concentran en el labio superior, la frente y los pómulos.
Manchas rojas
Y, por último, las manchas rojas, que se dan en mujeres de fototipos I y II, con la piel muy clara. Son pequeños diminutos vasos sanguíneos que se dilatan ante cambios bruscos de temperatura. Aparecen en mejillas, pómulos y nariz.
¿Cómo prevenir las manchas en la cara?
Es importante poner en práctica todas las medidas preventivas que sean necesarias para evitar las manchas en la cara, tanto por estética como por salud.
Imprescindible el uso de cremas fotoprotectoras durante todo el año, no sólo en verano. Deben proteger de las radiaciones UVB, UVA e IR. Además, hay que evitar tomar el sol durante las horas centrales del día.
A la hora de elegir la ropa, mejor escoger tejidos naturales, como el lino o el algodón. Para mantener el rostro resguardado, los sombreros son un accesorio indispensable.
Por supuesto, la rutina diaria de cuidado de la piel es esencial. Hay que realizarla dos veces al día, por la mañana y por la noche.