El entrenador del Getafe, Quique Sánchez Flores, consideró “justo” el empate que su equipo firmó en Balaídos pese al “dolor” que supuso que el Celta igualara en el minuto 88 con un tanto del central Joseph Aidoo.
“Es doloroso que te marquen en el 88 por lo difícil que es puntuar fuera de casa y sacar los tres puntos cuando lo has tenido tan cerca, pero si hacemos un análisis del partido la realidad es que el Celta mereció en el segundo tiempo llegar a ese gol. Por tanto, no nos puede sorprender el resultado”, indicó en rueda de prensa.
El preparador madrileño achacó a la situación clasificatoria que su equipo se encerrara en su campo en el segundo tiempo, y dijo que este punto lo valorarán con el paso de los días porque “nos ayudará a crecer”.
“Tenemos que trabajar para que el equipo en los segundos tiempos no pase esa dificultad. Los equipos cuando están en situaciones un poco complicadas tienden a protegerse, y ante un rival como el Celta que te presiona tanto nos hemos quedado sin armas ofensivas”, explicó.