El sonoro bofetón que se llevó el Espanyol en su visita al Brighton (5-1), unido al ‘pinchazo’ anterior ante la Balompédica Linense (0-1), ha hecho saltar las alarmas en el entorno perico a escasas dos semanas de que comience la Liga. La necesidad de reforzarse sin prisa se ha convertido ahora en una urgencia si se quiere afrontar con garantías el inicio de campeonato. Hay tiempo hasta el 1 de septiembre para inscribir nuevos jugadores y el club trabaja sin descanso con ese plazo en mente, pero los dos últimos batacazos han hecho evidente el equipo de Diego Martínez necesita unos ‘mínimos’ ya para el encuentro del sábado 13 de agosto ante el Celta de Vigo. De ahí a que se cierre el plazo de fichajes hay tres partidos ligueros que no se pueden tirar a la basura.
Lo que suceda en los próximos días estará condicionado por la situación de Raúl de Tomás. Su pulso con el entrenador ha enrarecido el ambiente y cada vez hay menos dudas sobre qué sería más conveniente. Pese a que desde el club se dice que interesaría reconducir el tema, lo cierto es que se sabe que se trata de un problema que puede volver a aparecer en cualquier momento. El toque de atención público del director deportivo, Domingo Catoira, instando al jugador al recuperar la forma lo antes posible y dejando claro que el club está del lado del entrenador a la hora de gestionar cualquier lío es un síntoma claro de por dónde van los tiros. De ahí que ahora mismo pese más en la balanza buscar una salida al delantero que ayudara a inyectar un dinero que vendría fenomenal para acudir al mercado de fichajes, algo innegociable tras la imagen dada por el equipo últimamente.
En este caso el problema está en que, como se viene repitiendo últimamente e incluso confirmó de viva voz el director deportivo de la entidad, Domingo Catoira, en que no hay oferta alguna por el goleador perico. Su alto precio de salida, 75 millones de euros, ahuyenta de momento a posibles interesados.
Se espera, no obstante, que acabe llegando alguna propuesta atractiva que permita no tener que fiar toda la política de fichajes a la llegada de jugadores gratis o de coste muy bajo. El dinero de RDT serviría para afrontar alguna operación de mayor calado. Igualmente, se está pendiente de dar salida a otros jugadores con los que en principio no cuenta Diego Martínez, como es el caso de Wu Lei, Vargas, Dimata, Vilhena, Embarba o Aleix Vidal
Dos días de descanso
Mientras tanto, en lo deportivo, la plantilla descansa hasta mañana, cuando reanudará los entrenamientos. La semana la culminará con un último y exigente amistoso antes de comenzar el campeonato. Será el sábado 6 de agosto ante el Nápoles en la localidad italiana de Castel di Sangro.