Los estadounidenses desplazados por la crisis del coronavirus presentaron reclamos de desempleo en números récord, y el Departamento de Trabajo informó el jueves un aumento de 3.28 millones.
El número rompe el pico de la crisis financiera de 665,000 en marzo de 2009 y la marca de todos los tiempos de 695,000 en octubre de 1982.
A nivel estatal, los números fueron impresionantes. La cifra de solicitudes en Pensilvania aumentó 20 veces, de 15,439 a 378,908. Nueva York vio su número más que quíntuplicarse, pasando de 14,272 de la semana anterior a 80,334, mientras que California se triplicó a 186,809. Louisiana, donde las infecciones por coronavirus han aumentado a un ritmo peligroso, pasó de 2,255 hace una semana a 72,620.
El aumento en las aplicaciones semanales fue un reflejo sorprendente del daño que el brote viral está causando a la economía. Las solicitudes de ayuda por desempleo generalmente reflejan el ritmo de los despidos.
El ritmo de los despidos seguramente se acelerará a medida que la economía estadounidense se hunda en una recesión. Los ingresos se han derrumbado en restaurantes, hoteles, cines, gimnasios y aerolíneas.
Las ventas de automóviles están cayendo en picado, y los fabricantes de automóviles tienen fábricas cercanas. La mayoría de estos empleadores enfrentan pagos de préstamos y otros costos fijos, por lo que están recortando empleos para ahorrar dinero.
A medida que aumentan las pérdidas de empleo, algunos economistas dicen que la tasa de desempleo de la nación podría acercarse al 13% en mayo. En comparación, la tasa de desempleo más alta durante la crisis financiera, que terminó en 2009, fue del 10%.
El deterioro económico ha sido rápido. Recientemente, en febrero, la tasa de desempleo estaba en un mínimo de 50 años de 3.5%. Y la economía crecía de manera constante aunque modesta. Sin embargo, para el trimestre de abril a junio del año, algunos economistas piensan que la economía se reducirá a su ritmo anual más fuerte que nunca, una contracción que podría alcanzar el 30%.
Muchas personas que han perdido empleos en los últimos días no han podido solicitar ayuda por desempleo porque los sitios web estatales y los sistemas telefónicos se han visto abrumados por una gran cantidad de solicitantes y se han congelado. Ese tumulto sugiere que el informe del jueves sobre las solicitudes de beneficios por desempleo en realidad subestima la magnitud de los recortes de empleos la semana pasada.