Perderse por la ciudad es un acto revolucionario que, como advertía Walter Benjamin, “requiere aprendizaje”. No existe un manual de instrucciones para iniciarse en la materia, pero sí muchas formas de cambiar nuestra perspectiva cotidiana. La nueva maxi scooter de Honda ha sido diseñada con esta finalidad: transformar la simple conducción en un ejercicio de total libertad. De líneas urbanas y rendimiento deportivo, redescubrimos el Madrid más cool de la mano de Honda Forza 750: una ruta por los espacios, galerías y restaurantes más originales y arriesgados de la capital.
09.00 h. El itinerario arranca con energía adentrándonos en la zona de Conde Duque, una de las más agitadas y modernas de la ciudad. En Delish Vegan Doughnuts, los habituales ya hacen cola para disfrutar de un café de especialidad con alguno de sus coloristas donuts veganos. Inspirados en la repostería neoyorquina, Joanna Espinel experimenta cada semana con nuevos sabores y lo hace de forma absolutamente natural y artesanal. El de chocolate con pistacho es la mejor forma de empezar el día.
Aparcamos antes en el espacio reservado para motos en la plaza de Guardias de Corps, frente al Centro de Cultura Contemporánea Conde Duque, un conjunto arquitectónico de estética militar que, en apenas unos años, se ha convertido en un auténtico catalizador cultural. En su cambiante patio, la instalación del escultor Manolo Paz, Los mares del Mundo, y El invernadero rojo de Patrick Hamilton nos invitan a interactuar y reflexionar acerca de nuestra relación con la naturaleza. Es tan solo una de las muchas apuestas de su agenda cultural, repleta de exposiciones, performances o conciertos. Este mes de abril actúan Dora e Hidrogenesse y en mayo, Bejo y Mori.
El diseño compacto y ágil de la Honda Forza 750 simplifica mucho la tediosa tarea de aparcar. Equipada con un chasis de acero y una suspensión deportiva, resulta muy fácil maniobrar con ella sin perder el equilibrio. La marca además ha incluido un freno de estacionamiento, con una palanca en el manillar muy práctica. Pero no es la única sorpresa: en su amplio cofre, bajo el asiento, podemos guardar el casco y cargar el móvil en una entrada USB.
11.30 h. Necesitaremos las dos manos para recorrer las tiendas de moda del barrio, por algo Conde Duque se ha convertido en la meca de las compras alternativas. Todo comenzó gracias a Sportivo. Desde su apertura en 2001, este espacio multimarca ha vestido (y educado) a varias generaciones de hombres. Lemaire, Dries Van Noten, Marni o Still by Hand son tan solo algunas de las marcas de su cuidada selección. Para celebrar su 20 aniversario, esta tienda insignia del estilo se ha aliado con algunas de sus marcas fetiche para lanzar algunas ediciones limitadas de venta solo en Sportivo.
Al otro lado de la plaza de Guardia de Corps, Mini Shop, comparte filosofía –la de ofrecer prendas totalmente distintas y únicas– y un look todavía más urbano. Esas ediciones especiales por las que todo el mundo pierde la cabeza suelen estar aquí. Para sneakerheads, Duke es una parada obligatoria. Las zapatillas que se llevan en las grandes capitales de la moda conviven aquí con accesorios de lanzamientos limitados: mochilas, bolsas o calcetines divertidos.
14.00 h. Almorzamos en una de las terrazas de moda de la Puerta de Alcalá. La amplitud de las aceras de la plaza de la Independencia, además, permite que dejemos nuestro maxi scooter casi en cualquier rincón. Las distancias en la ciudad, con la nueva Honda Forza 750, quedan reducidas en cuestión de minutos. Equipada con un motor bicilíndrico de 745 cc y un acelerador electrónico, su gran potencia se nota en los primeros metros. La adaptamos a nuestras condiciones gracias a sus cuatro modos de conducción: Standard, Sport, Rain y el personalizable User, garantizándonos un paseo suave y agradable. Las opciones para comer en la plaza más soleada de la ciudad son de lo más dispares: de la cocina de inspiración africana de Aarde a la carta mediterránea de Arahy y su famoso atún rojo, pasando por la veterana Ramses y sus platos con el sello de Arzak. Haciendo parada aquí es imposible equivocarse.
16.00 h. Todavía nos queda mucho por delante y, para que no derrochemos ni un segundo, Honda ha sido de las primeras marcas en incorporar las smartkey en sus vehículos. Con esta llave inteligente, sin necesidad de sacarla del bolsillo, podemos encender nuestra moto, gestionar el bloqueo de la dirección o abrir el asiento para coger el casco. Un tiempo que perdemos de forma inconsciente cuando podríamos dedicarlo a lo que más nos gusta; por ejemplo, a la mera contemplación. La calle Claudio Coello está dedicada a esta actividad recreativa.
En cuestión de metros encontramos los espacios más interesantes de la capital: la galería Fernando Pradilla, con una exposición dedicada al ‘hombre que diseñó España’, Cruz Novillo; la galería Guillermo de Osma y su incansable labor de acercarnos al arte moderno y contemporáneo, o la de Parra & Romero, especializada en arte conceptual y minimalista. Mucho más arriesgada ha sido la iniciativa de tres amigas –Cristina Herráiz, Ana Coronel del Palma y Sol Abaurrea–, de abrir la galería Intersticio en Lista, un lugar un poco más alejado del circuito artístico, pero a la que nos acercamos en apenas unos minutos gracias a la agilidad y potencia de nuestra Honda Forza 750. Igual de valiente es la apuesta de estas jóvenes galeristas por descubrir nuevos creadores, siempre, bajo un requisito fundamental: que sus obras no sean ajenas al contexto actual y propongan un diálogo crítico en torno a los conflictos contemporáneos. Casi nada.
18.00 h. Nuestra inspiradora ruta, como no podía ser otro modo, nos lleva ahora hasta Salesas. Conocido como la nueva milla de Oro, la actividad comercial de este barrio articulado en torno a la calle Barquillo, juega a la sorpresa y la indefinición. El mejor ejemplo lo encontramos en Pincoko, un espacio híbrido con cosmética, decoración y coctelería. Aquí tanto podemos recuperar fuerzas tomando uno de sus famosos dulces italianos, como fichar las últimas novedades en belleza o perfumería. Muy cerca, Ofelia Home Decor también apuesta por otra forma de comprar, más próxima a la experiencia sensorial. Defensora de una forma de vida más tranquila y auténtica, esta firma de interiorismo insiste en volver a reconciliarnos con nuestro hogar a base de muebles artesanales, textiles diferentes y vajillas únicas.
No nos engañemos: aunque queremos sitios que nos sorprendan, a la hora de conducir no nos gustan los imprevistos ni sobresaltos. La seguridad es uno de los puntos fuertes de la nueva Honda Forza 750. Los frenos, con pinzas de cuatro pistones y anclaje radial, se encargan de detener la maxi scooter con total seguridad. La marca ha añadido incluso una señal de parada de emergencia, de modo que al frenar con fuerza, los intermitentes traseros parpadean para advertir a los que vienen detrás y se apagan de forma automática.
19.00 h. Con esa confianza al volante nos desplazamos hasta el paseo del Prado para visitar la tienda-galería La Fábrica y perdernos en sus libros de fotografía –para celebrar los 25 años de andadura editorial, el sello ha lanzado los últimos ejemplares de sus libros más demandados– y exposiciones. Dentro del ciclo Madrid Design Festival, la galería rinde homenaje al artista gráfico Alberto Corazón con una selección de sus obras más representativas y un coloquio para acercarnos la importancia de su trabajo en ámbitos tan dispares como la escultura, la pintura o el ensayo. Porque perderse por la ciudad es un arte, pero también una buena opción en la compañía de nuestra Honda Forza 750.