El español Álex Palou protagonizó este domingo una gran remontada en la Honda Indy Toronto al terminar en el sexto puesto, tras empezar en el 22, en una carrera que ganó Scott Dixon lo que le permitió convertirse en el segundo piloto con más victorias en IndyCar, 52, empatado con Michael Andretti.
La remontada de Palou, que era la primera vez que corría en el estrecho e irregular circuito urbano de Toronto, permitió al piloto español colocarse en el tercer puesto de la clasificación de la IndyCar, con 314 puntos, a sólo dos del segundo, Will Power.
Marcus Ericsson, que terminó hoy en quinto lugar en la Honda Indy Toronto, se afianza en el liderato de la IndyCar con 351 puntos.
En Toronto, el segundo lugar correspondió a Colton Herta, que el sábado había conseguido la pole, mientras que el tercer puesto se lo adjudicó Felix Rosenqvist.
Nada más terminar la carrera, Palou expresó a Efe su satisfacción por el resultado tras un difícil fin de semana en el que dañó su coche el sábado en la segunda tanda de entrenamientos, al golpear con violencia las barreras de cemento del trazado canadiense, y posteriormente sufrió una avería durante la calificación que le relegó al puesto 22.
“No era el fin de semana perfecto, pero lo hemos apañado bastante bien con la carrera así que contento de terminar sexto”, explicó el piloto español.
Palou mantuvo un ritmo constante de mejora durante las 85 vueltas al circuito de Toronto.
Nada más iniciarse la carrera, Palou ganó cinco posiciones en la primera vuelta y se situó en el puesto 17. Dos vueltas más tarde, el ex Fórmula 1 Takuma Sato, protagonizó un accidente que obligó a la primera bandera amarilla de la carrera.
Tras la reanudación, el piloto barcelonés, fue el primero en entrar a boxes, en la vuelta 10, para cambiar los neumático blandos por duros, lo que le relegó al último puesto.
Pero una vez que el resto de pilotos con neumáticos blandos empezaron a pasar por boxes para colocar los más duros, la estrategia de su equipo, Chip Ganassi Racing (CRG), funcionó y Palou ganó rápidamente puestos en la clasificación.
En la vuelta 21, el actual campeón de la IndyCar ya era el 16; en la 32 el número 14; y al meridiano de la carrera, Palou se había colocado en el puesto 11.
Por delante, Herta había perdido el liderazgo tras la primera ronda de paradas en boxes. Rinus VeeKay, que empezó en el puesto 20 con los neumáticos duros, y después Pato O’Ward, con una estrategia similar, se alternaron en la cabeza.
Pero en la vuelta 45, Alexander Rossi y Rosenqvist, tuvieron un encontronazo mientras batallaban por el cuarto puesto. El coche de Rossi se empotró contras las barreras, lo que terminó con la carrera del estadounidense y provocó una frenética parada masiva en boxes.
Palou se aprovechó del caos y en la vuelta 46 se colocó en el puesto décimo. Cinco giros más y el español era el 8.
Tras una nueva bandera amarilla, Palou, que ya estaba en el séptimo lugar, protagonizó uno de los adelantamientos de la jornada al pasar por el interior de una curva a Simon Pagenaud, lo que le catapultó al sexto puesto.
El barcelonés de 25 años probó en una par de ocasiones hacerse con el quinto puesto. Pero Ericsson no cedió y Palou se concentró en la estrategia a largo plazo, recoger una buena cosecha de puntos en Toronto y seguir apuntando a revalidar este año el campeonato norteamericano.
Mientras, en la cabeza, Dixon, también parte de CRG, dominaba con relativa facilidad desde el accidente de Rossi. Herta en segundo lugar, se las veía y deseaba para mantener a su rueda trasera a Rosenqvist, que apretó al estadounidense hasta el banderazo final que certificó la 52 victoria del neozelandés Dixon en la IndyCar.