COLORADO – Dos estudiantes de secundaria utilizaron al menos dos armas de fuego durante un tiroteo en una escuela secundaria que dejó muerto a uno de sus compañeros de clase y a otros ocho heridos en una comunidad en las afueras de Denver que hace apenas unas semanas recordó el 20º aniversario de una de las peores masacres escolares de Estados Unidos.
El ataque a la escuela STEM Highlands Ranch del martes por la tarde, ocurrió a apenas unas millas de la Escuela Secundaria Columbine, algo que de inmediato planteó preguntas sobre si se inspiró en esa masacre de 1999, pero no hubo respuesta de inmediato.
La policía del condado de Douglas dijo que Devon Erickson, de 18 años, y otra estudiante más joven que no fue identificada entraron a la escuela por una puerta sin detectores de metal y abrieron fuego con dos armas contra los estudiantes en dos salones de clase.
El jefe de policía Tony Spurlok dijo a la prensa que los sospechosos tenían “varias armas”, entre las que había dos pistolas que Spurlock dijo que los sospechosos no tenían edad para poseer o comprar.
El martes, las autoridades identificaron al segundo sospechoso como un joven, pero Spurlock dijo a la prensa el miércoles que era una mujer. El abogado de la muchacha dijo que ella se identifica como hombre.
“Por su apariencia, originalmente pensamos que era un hombre”, dijo Spurlock, quien se negó a responder si era transgénero.
El estudiante que murió fue Kendrick Castillo, de 18 años, según su padre John Castillo. Dijo a la televisora KMGH-TV que su hijo era un héroe y quería que la gente lo supiera.
La estudiante Nui Giasolli dijo al programa “Today” de la NBC que estaba en su clase de literatura británica cuando Erickson llegó tarde y sacó un arma de fuego.
“Caminó hacia el otro lado del aula donde también teníamos otra puerta y abrió la puerta. Caminó hacia atrás como si fuera a volver a su asiento, luego caminó hacia la puerta y la cerró. Luego sacó un arma y dijo que ‘nadie se mueva’”, agregó.
Giasolli dijo que Castillo se abalanzó sobre el que disparó, dando a los otros estudiantes tiempo para meterse debajo de los escritorios o huir a un lugar seguro.
Mientras los disparos resonaban por la escuela pública tipo chárter, independiente de la junta escolar local, los estudiantes se escondieron o corrieron por los pasillos, algunos gritando.
“Nadie sabía realmente lo que estaba pasando, así que yo no sabía que eran balas”, dijo la estudiante de séptimo grado Sophia Marks. “Sólo vi algo como flashes y oímos explosiones”.
Apenas unos minutos después de que comenzaron los disparos, los agentes de una delegación de policía cercana ingresaron a la escuela y arrestaron a los agresores sin intercambio de disparos. Uno de los sospechosos fue detenido por el guardia de seguridad de la escuela, agregó Spurlock.
La AP dejó un mensaje en un número de teléfono que supuestamente es de la casa donde vive Erickson, pero nadie respondió de momento. Estaba previsto que el miércoles por la tarde tuviera una primera audiencia en un tribunal.
No quedó claro tampoco cuándo comparecerá ante un tribunal la otra sospechosa.
El tiroteo ocurrió exactamente una semana después de que un hombre armado mató a dos estudiantes e hirió a cuatro en la Universidad de Carolina del Norte en Charlotte.
También ocurrió casi tres semanas después de que en la vecina localidad de Littleton se conmemoró el vigésimo aniversario de la masacre en la escuela Columbine, donde fueron asesinadas 13 personas. Ambas escuelas están a siete millas de distancia entre sí, en comunidades adyacentes al sur de Denver.
“Trágicamente, esta comunidad y las que la rodean conocen demasiado bien estos horrendos actos de violencia”, dijo el portavoz de la Casa Blanca Judd Deere en un comunicado. El presidente Donald Trump fue informado del tiroteo y estuvo en comunicación con las autoridades locales y estatales, añadió el vocero.
STEM es una escuela que se enfoca en ciencia, tecnología, ingeniería y matemática. Tiene más de 1,850 estudiantes, desde kínder hasta el 12vo grado.
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