Al delantero brasileño le lanzaron un plátano desde la grada después de marcar el 2-1 en el Parque de los Príncipes
El racismo sigue sin erradicarse. El último en sufrir las consecuencias de esa lacra social fue Richarlison, al que le lanzaron un plátano desde la grada. Tras el 2-1, un sector de la grada ocupado mayoritariamente por aficionados tunecinos la tomó con el futbolista del Tottenham, al que quisieron faltar con este gesto que desgraciadamente ya se ha repetido en muchas ocasiones en distintos estadios europeos.
Durante el primer tiempo, el árbitro tuvo que detener el encuentro por el mal comportamiento de algunos aficionados. Por megafonía se pudo escuchar en francés cómo se reiteraba la prohibición de utilizar láseres, que apuntaron sistemáticamente contra el árbitro y también contra Neymar antes de que el brasileño se dispusiera a ejecutar la pena máxima que supuso el 3-1.
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