El pasado domingo 14 de febrero de 2021, día en el que se celebra alrededor del mundo la festividad de San Valentín, se cumplieron diez años desde que Ronaldo
Luís
Nazário
de
Lima colgara las botas.
Su maldita rodilla
Una fecha significativa para el fin de la carrera de un futbolista que nos enamoró a todos con su fútbol y que, de no haber sido por la gravísima lesión que, siendo jugador del Inter, sufrió en el tendón rotuliano de su rodilla derecha el 12 de abril del 2000 en la ida de la final de la Coppa de Italia ante la Lazio, “habría sido el más grande de la historia”, según palabras del malogrado Diego
Armando
Maradona.
Aún así, los amantes del fútbol recordaremos al ‘Fenómeno’ como uno de los mejores goleadores de siempre. Futbolista de inagotables recursos, se hartó de marcar goles y de levantar títulos allí donde fue, con un único pero. El de no haber levantado la Champions
League, el máximo galardón a nivel de clubes en Europa.
Para el recuerdo quedarán sus dos goles a Oliver
Kahn en la final del Mundial 2002 que alzó con la ‘Canarinha’, escudado por Rivaldo y Ronaldinho
Gaúcho, su estratosférica temporada en Barcelona -logrando 47 goles y 12 asistencias en 49 partidos como azulgrana- o los más de 100 goles que anotó con la camiseta del Real
Madrid, su penúltimo club en Europa ante de regresar a su Brasil natal, donde nos regaló sus últimos ratos de fútbol en las filas del Corinthians.
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También sus inconfundibles bicicletas, su inagotable reparto de regates y su inimitable manera de sentar a un portero tras otro cuando les encaraba.
Un palmarés infinito
Dos veces ganador del Balón de Oro (1997 y 2002), tres veces mejor jugador del mundo para la FIFA (1996, 1997 y 2002), poseedor de dos Mundiales (1994 y 2002), dos Copas América (1997 y 1999), dos Ligas españolas (2003 y 2007), una Copa de la UEFA (1998)… El palmarés de Ronaldo es infinito. Y la gratitud de los que amamos el fútbol hacia él, eterna.
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