La salida del GP de Abu Dhabi fue limpia en la cabeza. Max Verstappen no cedió su posición ante Pérez con un buen arranque y Leclerc se mantuvo tercero. Intentó meterle el coche por el interior en las primeras curvas al mexicano, pero el de Guadalajara traccionó bien y pudo mantener una segunda plaza clave para poder escaparse en busca del subcampeonato del mundo de F1 ante el monegasco. Pero sin duda, el protagonismo en la salida fue para Carlos Sainz y Lewis Hamilton. El piloto español se vio superado en los primeros metros por el británico y el madrileño le devolvió la maniobra en la curva 6, con un gran interior tirándose al vértice de la curva desde muy lejos, con una frenada muy fuerte. Lewis se quedó por el exterior y decidió recortar la curva, volviendo a pista de nuevo por delante de Sainz.
Dirección de carrera dudó si investigar o no la acción. Sainz estallaba por radio, pidiendo que le devolviera la plaza porque se la había ganado por fuera de la pista. Finalmente, en la vuelta 5, demasiado tarde, el inglés le devolvió el puesto a Carlos, pero en ese mismo giro el británico se mantuvo cerca de Carlos para cogerle el DRS y adelantarlo sin complicaciones. Carlos se mantuvo pegado y lo volvió a intentar en la vuelta 8, pasando de nuevo a Lewis para colocarse otra vez en la cuarta plaza, a 3″ de Sainz.
Hamilton bajó el ritmo y Russell preguntó por radio, extrañado, por su compañero. “Sois libres de pelear”, le contestaron por radio. Así, en la vuelta 9, George atacó al 7 veces campeón para pasarle sin miramientos. “Estoy perdiendo potencia”, se quejaba por radio Hamilton, ya en la sexta plaza.