En medio de la tempestad desatada en la selección femenina, la Real vive estos días con pasión y concentración tras el buen partido del martes ante el Bayern y el que les enfrenta hoy (18 horas) al Betis en Zubieta. Las jugadoras han cambiado el chip, sin dejar de mirar de reojo al jueves. Gemma Gili (Castellón, 1994) es las de las veteranas y tiene la ilusión por bandera.
Tras el gran esfuerzo del martes, ¿cómo se encuentran de cara al partido de hoy?
El equipo se ha recuperado bien y anímicamente salimos reforzadas del partido del martes. Llegamos en buenas condiciones a este partido.
¿Preparadas para ser la Real de este último año?
Sí, sí. El estilo no lo vamos a cambiar porque ha funcionado. El cansancio siempre pasa factura, pero nos tenemos que acostumbrar a eso: jugar entre semana y competir al máximo nivel.
¿Mentalmente les cuesta cambiar el chip?
Yo creo que no. A nosotras lo que más nos gusta es competir. Si vienen tres partidos cada semana, para nosotras mejor. Para jugar un partido, siempre estás preparada.
Toca el Betis, ¿asumen que hay que bajar de nuevo a la tierra?
Al final, después del partido del martes, lo más importante es no restarle esa importancia a la Liga, que no nos pase factura. Hay que darle la misma importancia que al partido del martes y al del sábado pasado. Perder puntos ahora aquí en casa, puede pasarnos factura más tarde. Tenemos muy, muy claro eso. Saldremos con las mismas ganas y la misma ilusión que en cada partido.
Tras el partido del martes, ¿cuáles eran sus sensaciones al llegar al vestuario?
Mi sensación era que no le podía reprochar nada a nadie, que mi equipo se había dejado todo en el campo, que lo intentamos hasta el final, que la afición estaba volcadísima con nosotros y que dimos una sensación de no tener miedo ante ningún rival. Eso es lo que me llevé. Por todo eso me molesta un poco o me deja una sensación agridulce el no haber conseguido algo más.
Desde fuera, pareció que se lo fueron creyendo durante el partido, ¿fue así?
Sí. Cuando juegas por primera vez una eliminatoria como ésta, a ida y vuelta, tampoco tienes muy claro qué te vas a encontrar. Por eso los primeros minutos fueron para saber cómo venían ellas, cómo les podíamos hacer daño.
¿Se puede soñar cara al jueves que viene?
Se puede soñar al 100%. Si no estuviera convencida, le diría al equipo que no viajásemos a Múnich. La eliminatoria sigue abierta. Hemos demostrado que tenemos capacidad para adaptarnos a todo. Vamos a ir con todo y a morir con lo nuestro. Es lo que nos ha dado lo que hemos conseguido hasta ahora.
Vuelve la Liga, se han puesto el listón muy alto, ¿cuál es su mentalidad?
La gente es consciente de lo difícil que es conseguir lo que conseguimos el año pasado. En una Liga donde hay equipos como el Barça, el Real Madrid o el Atlético, que tienen una capacidad fuerte para aportar por la sección femenina, conseguir la segunda plaza tuvo mucho mérito, hicimos un gran trabajo. Fuimos regulares durante todo el año. Nos motiva para seguir trabajando igual, dándole valor al día a día.
La plantilla es más larga este curso, ¿les da tranquilidad?
100%. Era lo que queríamos. Cuantas más, mejor. Todas estamos para sumar. Que haya competencia siempre es bueno, porque así cada una saca su mejor versión para jugar. Y también que Natalia tenga más posibilidades. Gana el equipo.
¿Qué mensaje de Natalia le cala más hondo?
Lo mejor que tiene Natalia es que es valiente, que tiene muy clara su idea de juego. Es lo que siempre nos transmite. Si la entrenadora lo tiene claro, cómo no lo va a tener claro el resto. Vamos a muerte con lo que ella piensa y cree porque nos ha dado resultado.
Nerea y Amaiur están entre las 15 jugadoras que han anunciado que no irán a la selección en las actuales circunstancias, ¿cómo les ha visto?
Yo las veo tranquilas. Es lo que trasladan ellas. Aquí están a gusto, aquí están bien. Se les cuida y se les mima. Mientras ellas estén bien, la decisión que ellas tomen, que sus razones tendrán, bien estará.