Salvamento Marítimo ha rescatado este martes a 178 migrantes en cuatro embarcaciones diferentes que se encontraban en las proximidades de Canarias. La entidad encargada de la seguridad marítima en aguas españolas también ha recuperado del Atlántico el cadáver de una mujer subsahariana que llevaba cerca de dos semanas en el mar, según cálculos de los rescatadores.
La embarcación Guardarmar Talía, dedicada a labores de salvamento, ha hallado el cuerpo sin vida de la mujer mientras se dirigía a rescatar a los ocupantes de una lancha a motor que había pedido ayuda por teléfono móvil, a unos 90 kilómetros al sur de Fuerteventura. La aparición del cadáver hizo pensar inicialmente a los rescatadores que podría tratarse de alguno de los ocupantes de esa embarcación, pero su avanzado estado de descomposición les llevó a descartar esa posibilidad. La lancha que había pedido ayuda fue localizada poco después a unos kilómetros de ese punto, con 55 personas de origen subsahariano a bordo: 44 hombres, nueve mujeres y dos bebés.
Mientras esa operación estaba todavía abierta, Salvamento Marítimo recibió también la llamada de un buque mercante que se encontraba entre Canarias y Marruecos en la que les avisaba de la presencia de otra embarcación. Salió en su ayuda el equipo de la Salvamar Al Nair, que rescató a los 57 inmigrantes que iban a bordo: 45 hombres, diez mujeres, un niño y un bebé. Las mujeres y los niños son de origen subsahariano, mientras que entre los hombres hay subsaharianos, magrebíes y bangladesíes, según han precisado fuentes de los servicios de emergencia de Fuerteventura a su llegada a Puerto del Rosario (Fuerteventura).
Este mismo martes por la mañana, la Guardamar Concepción Arenal ha socorrido a 18 kilómetros de Gran Canaria a los ocupantes de una patera con 31 migrantes de origen subsahariano: 29 hombres y dos mujeres. Según la información que ha recabado la Guardia Civil, se trata de un cayuco procedente de Nuakchot (Mauritania) que llevaba cinco días en el mar. Poco después, Salvamento Marítimo auxiliaba a una segunda patera detectada en las proximidades de Gran Canaria, a unos 11 kilómetros de Maspalomas, con 35 hombres magrebíes a bordo que fueron trasladados al puerto de Arguineguín, en Gran Canaria.
Las llegadas a las islas Canarias se mantienen constantes y hace meses que duplican los registros del año pasado, cuando el archipiélago vivió un repunte que no se veía desde la llamada crisis de los cayucos de 2005. En lo que va de año han desembarcado en las islas más de 15.000 personas y, según los cálculos más conservadores de la Organización Internacional para las Migraciones, se contabilizan ya casi 800 muertos y desaparecidos.
El pasado 14 de octubre, un bebé nacido a bordo de una patera en un parto gemelar murió en la travesía hacia las islas. La madre, que había dado a luz cuatro horas antes de ser rescatada, y el bebé superviviente fueron trasladados a un hospital de Gran Canaria. Diez días después, un niño de unos seis años murió en su intento de llegar en patera a Canarias, según han confirmado fuentes de Cruz Roja. El crío viajaba con su madre y una hermana y otras 49 personas que fueron rescatadas in extremis tras casi dos semanas en el mar.
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