El lanzamiento del esperado Samsung Galaxy S21 FE ha estado rodeado de todo tipo de rumores y filtraciones. Mientras que en los últimos meses algunos medios especializados indicaban que se retrasaría, otros iban más allá y apuntaban hacia una posible cancelación. El momento al fin ha llegado. El Galaxy S21 FE incorpora algunas de las características estrella de los potentes Galaxy S21, pero a un precio un poco más asequible —parte de los 759 euros frente a los 849 euros que valía el S21 en el momento de su lanzamiento—. El terminal, además de ser compatible con las redes 5G, tiene una pantalla más grande, un potente procesador y una triple cámara trasera algo menos ambiciosa que la de sus hermanos mayores.
EL PAÍS ha podido tener un primer contacto con el móvil en el CES, la mayor feria de electrónica de consumo del mundo, que se celebra en Las Vegas entre el 5 y el 7 de enero. El diseño del Samsung S21 FE es bastante similar al del S21. El módulo de cámaras trasero mantiene una forma rectangular, está pegado a los bordes del terminal y sobresale ligeramente. El móvil resulta cómodo en mano. Está disponible en cuatro colores —verde oliva, negro, lavanda y blanco—. Su trasera tiene un acabado mate y es bastante limpia. Al utilizarlo, prácticamente no quedan marcadas en ella las huellas dactilares.
La pantalla AMOLED es de 6,4 pulgadas. Es decir, un poco más grande que la del S21 (6,2 pulgadas) pero un poco más pequeña que la de su antecesor, el Galaxy S20 FE (6,5 pulgadas). Además de verse brillante y nítida, tiene una tasa de refresco adaptable que alcanza los 120 Hz. La tasa de refresco hace referencia a la cantidad de veces que la pantalla se actualiza por segundo. Por lo tanto, cuanto más alta sea, más fluidos son los desplazamientos entre pantallas. Pero también se gasta más batería. En las primeras impresiones, con la tasa adaptable activada, la experiencia resulta fluida y las transiciones, bastante suaves.
En el centro de la parte superior de la pantalla hay un pequeño agujero para la cámara frontal, que tiene 32 megapíxeles. El Galaxy S21 FE tiene además tres cámaras traseras: un sensor principal y un gran angular de 12 megapíxeles y un teleobjetivo de 8 megapíxeles. En el apartado fotográfico este móvil es muy similar a su antecesor y algo menos ambicioso que sus hermanos mayores. El S21 y el S21+ cuentan con un teleobjetivo de 64 megapíxeles. A priori las fotografías realizadas por este terminal resultan realistas y bastante coloridas. En teoría el modo nocturno ha sido mejorado. El fabricante promete mejores imágenes con poca luz.
El móvil es compatible con las redes 5G y cuenta con uno de los procesadores más potentes para la gama alta: el Snapdragon 888 de Qualcomm. El usuario puede escoger entre dos modelos: uno de 6GB de memoria y 128GB de almacenamiento y otro de 8GB de RAM y 256GB de almacenamiento. La batería es de 4.500mAh con carga rápida de 25W. La del S21 es de 4.000 mAh y la del S21+, de 4.800 mAh. Samsung promete una autonomía de más de un día. Al igual que ocurre con el S21 y a diferencia del Galaxy S21 Ulta, el Galaxy S21 FE no es compatible con él S Pen, el lápiz óptico de la marca surcoreana que permite tomar notas en la pantalla o manejar el móvil con gestos.
Samsung asegura que su antecesor, el Galaxy S20 Fe, tuvo “una respuesta increíble”. “Así que aplicamos el mismo enfoque con el S21 FE 5G, equipándolo con las funciones premium que más importan a nuestros fanáticos del Galaxy”, afirma TM Roh, presidente y director de negocios de comunicaciones móviles de Samsung Electronics. La marca surcoreana no es la única que en los últimos años ha lanzado modelos más asequibles de sus topes de gama. En los últimos años otros gigantes tecnológicos como Apple y Google también han recurrido a esta estrategia.
Puedes seguir a EL PAÍS TECNOLOGÍA en Facebook y Twitter o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.