San Mamés luce orgulloso ante el resto de estadios de Primera. Cuida con tacto y con mimo de los suyos, pero se muestra despiadado con sus visitantes. Hablamos de fútbol. Con las bicicletas no tiene ningún tipo de problema. Es la mayor fortaleza en la máxima categoría. Los 16 encuentros que el Athletic lleva invicto en Primera suponen la mejor racha actual de los equipos de la Liga. Va para un año desde que los leones cedieran como locales por última vez. Fue un 5 de octubre de 2018 en un derbi contra la Real Sociedad (1-3), con Berizzo en el banquillo.
Nadie llega tan alto en estos momentos. El Athletic puede presumir de mirar por el retrovisor al resto de escuadras. El Barça es el más cercano. Encadena 13 citas sin caer en el Camp Nou. El último tropiezo data del 11 de noviembre del pasado año contra el Betis (3-4). El podio de esta racha lo completa el Atlético. 9 compromisos seguidos sin perder en el Metropolitano. El más reciente en profanarlo en el torneo de la regularidad fue el Real Madrid (1-3) el 9 de febrero.
Osasuna también ha creado un fortín en El Sadar. Suma 27 partidos sin conocer la derrota ante su público. Con el matiz de que es entre Primera y Segunda. Una dinámica de resultados que se inició tras el 0-1 del Tenerife en Pamplona el 1 de abril de 2018. En total, en la máxima categoría, son 6 envites consecutivos invictos los que lleva Osasuna. Dos en su actual andadura en Primera y otros cuatro en la temporada 2016-17. El Athletic fue precisamente el último equipo que se anotó los tres puntos en El Sadar (1-2). Aduriz y Williams firmaron los tantos rojiblancos en la primera mitad y Sergio León acercó a los rojillos en el tramo final.
San Mamés ha sido el mejor aliado del Athletic en los últimos meses. Le ayudó a escapar del descenso, a pelear por la clasificación europea y en el arranque del actual campeonato a despertar la ilusión. Los bilbaínos han logrado diez triunfos y seis empates en su actual racha. Unos guarismos que mejoran contando solo los encuentros con Gaizka Garitano. Y es que los dos primeros choques con los que se dio inicio a esta dinámica fueron dos igualadas con Berizzo a los mandos.
No es que el Athletic haya arrasado a sus rivales a base de goles, pero los que ha metido los ha aprovechado a la perfección gracias a su solidez defensiva. Ha firmado 23 dianas y solo ha recibido 9. Williams ejerce de pichichi con 8 muescas una vez que saltó por los aires su maleficio casero. Raúl García le sigue con 6. Aduriz aparece con 3, a cada cual de más valor. Convirtió un agónico penalti ante el Girona en el estreno de Garitano con el Athletic con el agua al cuello. La pena máxima que anotó contra el Valladolid dio la vuelta al mundo. La famosa ‘Adurizinha’. Y qué decir de la última obra de arte contra el Barça. Una media chilena antológica.
Aduriz dejó dos grandes destellos, el penalti en parado ante el Valladolid y la media chilena frente al Barça, pero Williams es el pichichi con ocho tantos
Los leones se han manejado de maravilla en los minutos de máxima tensión. Logró las mencionadas victorias frente a Girona y Barça sobre la bocina, al igual que ante el Levante. Lo más cerca que estuvo la derrota fue en la visita del Espanyol. Raúl García consiguió rescatar un empate en el minuto 81. La racha no se ha perdido con el paso del verano. Al contrario. El Athletic se ha hecho más fuerte si cabe. Ha demostrado un importante feeling con la grada y San Mamés lució como en sus mejores noches frente a Barça y Real. ¡Que siga la racha!
La racha del Athletic se circunscribe a la Liga. El único borrón en San Mamés con Garitano en el banquillo se produjo en la Copa del Rey. Los leones cayeron 1-3 frente al Sevilla en la ida de octavos en la pasada edición del torneo del KO. Sin embargo, los leones tenían otras preocupaciones mayores. Poco importaba entonces la Copa.
El Athletic se movía en tierras pantanosas. Afrontó el choque ante el Sevilla con una renta de dos puntos con el descenso y sabiendo que tres días después se volvía a ver las caras con los hispalenses en la Liga. Una cita que se saldó con 2-0 para los bilbaínos.
Fue un partido con muy mal recuerdo para el Athletic. Al negativo resultado hubo que sumarle la lesión de Aduriz tras un ‘recadito’ de Amadou. El donostiarra estuvo tres meses en el dique seco por unos problemas en la rodilla.
A buen seguro que Garitano y los rojiblancos querrán sacarse esa espina con la Copa en la presente campaña. Un torneo del KO que ha cambiado su formato y que será a partido único hasta cuartos.
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