La organización Causa en Común advirtió que se intentando cambiar la cultura civilista por una militarista, ya que el papel de las Fuerzas Armadas ha aumentado y la Guardia Nacional (GN) ha incrementado sus elementos, presupuesto y tareas.
De acuerdo con el informe Guardia Nacional, 3 años de definición militarista, publicado este miércoles, este organismo pasó de tener 56 mil 191 elementos en agosto de 2019, a 104 mil 839 para abril de 2022.
Además, la Secretaría de la Defensa Nacional(SEDENA) y la GN cuentan con un presupuesto de cerca de 170 mil millones de pesos, 9% más que lo aprobado para 2021 y 80% más que en 2020.
“Este presupuesto es el segundo más importante de la presente administración”, señala el informe.
Igualmente advierte que cuenta con un total de 594 cuarteles, cada uno con un costo de 34 millones de pesos.
Alejandro Hope, analista de seguridad, recalcó durante la presentación del informe, que la Guardia Nacional es una extensión de las Fuerzas Armadas debido a que el 80% de sus miembros no labora en la GN. Además, todos los cuarteles han sido construidos por SEDENA.
El informe también señala que 163 cargos de la administración pública han sido ocupados por integrantes –ya sea en retiro o en activo- de las Fuerzas Armadas.
“Así, además de la seguridad pública, militares ya ocupan posiciones directivas en instituciones de salud, migración, transporte y logística, además del manejo de puertos y aduanas”, detalla el reporte.
Igualmente afirma que se entregan funciones a miembros militares y se asigna presupuesto de instituciones públicas a dependencias militares.
Ante esto, Maria Elena Morera, presidenta de Causa en Común, sostuvo que “ya no estamos hablando solo de militarización, sino de militarismo”, ya que se está “intentando cambiar la cultura civilista por una cultura militarista”.
De acuerdo con la organización, el actual gobierno ha incrementado, “como ningún otro, la presencia y el poder de las Fuerzas Armadas”.
Esto, sostiene, incrementa el riesgo de corrupción y el peligro de un mayor número de violaciones a los derechos humanos, así como fortalece a las Fuerzas Armadas en detrimento de las policías locales.
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