Aunque las últimas encuestas daban una clara ventaja a Lacalle Pou, el escenario es de empate técnico, lo que significaría que la izquierda logró reponerse y podría seguir gobernando Uruguay como sucede desde 2005.
Con más del 90% de los votos escrutados, la jornada electoral para elegir nuevo presidente en Uruguay, apunta a un empate técnico entre Daniel Martínez, del Frente Amplio, y Luis Lacalle Pou, del Partido Nacional.
Notimex señala que con base en datos difundidos por la Televisión Nacional de Uruguay (TNU), tanto Martínez como Lacalle Pou concentran cada uno un 48.2 por ciento de las preferencias electorales, con 3.6 por ciento de votos en blanco o anulados.
Beatriz Argimón, candidata a la vicepresidencia por el Partido Nacional y, por tanto, mancuerna de Lacalle, admitió que se requiere mucha cautela para estos momentos.
Los circuitos electorales cerraron a las 19:30 horas. Aunque las últimas encuestas daban una clara ventaja a Lacalle Pou, el escenario es de empate técnico, lo que significaría que la izquierda logró reponerse y podría seguir gobernando Uruguay como sucede desde 2005, con las presidencias de Tabaré Vázquez y José Mujica.
“Nuestra identidad democrática es robusta y hay que cuidarle en cada gesto y desde todas las opciones políticas. Uruguay es hermoso y la fiesta cívica de hoy, con cualquier resultado, ratificará la vocación popular de construir desde los encuentros orgullosos de nuestra libertad”, expresó el candidato del Frente Amplio, Daniel Martínez.
Por el momento, Lacalle no ha concedido declaraciones.
De acuerdo con El País, Luis Lacalle Pou, de 46 años de edad, es un experimentado parlamentario (fue diputado a los 20 años) que ya fue candidato por el Partido Nacional en 2014, elección presidencial que perdió frente al actual presidente, Tabaré Vázquez.
Lacalle Pou busca revertir numerosas políticas del Frente Amplio en temas clave como la economía, la educación, la seguridad ciudadana o las políticas sociales. Sin embargo, ha señalado que no anulará la llamada “agenda de derechos” implementada por la izquierda, que incluye leyes como la despenalización del aborto, el matrimonio homosexual, la legalización de la marihuana y la protección de las personas trans.
Por su parte, Daniel Martínez, candidato del Frente Amplio, es un ingeniero socialista de 62 años que ha propuesto un programa continuista, con el foco en mejorar las políticas públicas del Frente Amplio que han convertido a Uruguay en el país con menos pobreza y desigualdades de América Latina.
Martínez tiene la dura tarea de organizar el relevo de las tres grandes figuras de la izquierda uruguaya que se van retirando por razones de edad: el expresidente José Mujica, el actual mandatario Tabaré Vázquez y el ministro de economía Danilo Astori.
Si bien Daniel Martínez ganó la primera vuelta el 27 de octubre con el 39% de los votos, las leyes electorales de Uruguay señalan que para ganar en esa primera ronda, es necesario que un candidato obtenga 50% más uno de los votos. De lo contrario, los aspirantes presidenciales que ocupen los dos primeros lugares irán a una segunda vuelta.
Ante esto, Lacalle Pou, quien obtuvo un 28%, formó una coalición conservadora con la clase política que repele al Frente Amplio para ganar en la segunda vuelta.