Sergi Roberto, en una entrevista al diario Ara, explica algunas de las sensaciones que se vivieron en Lisboa en los momentos inmediatamente posteriores al 2-8 encajado ante el Bayern. El jugador blaugrana lo hace en una amplia entrevista en la que se refiere también a la situación de Messi, a la salida de Luis Suárez y del cambio de directiva que aguarda al club, entre otras cosas.
La situación de Leo Messi
“Dijo que se quedaría sólo un año más, pero si jugamos bien, las sensaciones son buenas y ganamos títulos quién sabe si cambiará de opinión. Si lo logramos, mucho mejor”.
Para Leo, Luis es un hermano. Al final es como cuando te separas de tu esposa o de tu mejor amigo
“Para Leo, Luis Suárez es como un hermano, estaban todo el día juntos. No le ha sentado bien ver que se marcha cuando él no quería. Espero que con los días se vaya encontrando mejor y que podamos contar con Leo para ganar los títulos. Al final es como cuando te separas de tu esposa o de tu mejor amigo, son procesos complicados. Ahora los compañeros nos esforzaremos para que se sienta querido”.
La salida de Luis Suárez
A Suárez se le podría haber avisado con más tiempo y no con una llamada telefónica
“No sé como han ido las conversaciones entre él y el club, pero es cierto que se le podría haber avisado con más tiempo y no con una llamada telefónica. Y es una pena que no se haya podido despedir con público”.
La relación vestuario-directiva
“Es como en cualquier empresa. Las cosas irán mejor y se rendirá más si hay buena relación entre todos los empleados. Pero yo lo que quiero es que el Barça vaya bien, que el equipo gane títulos, con jugadores de la casa, que la gente se sienta identificada con lo que ve. Quiero un presidente que busque lo mejor para el club, me da igual si baja o no al vestuario”.
El 2-8 ante el Bayern
“Es difícil encontrarle una explicación. Con 1-1 tuvimos un palo y aquello pudo cambiar el partido, pero nos marcaron el segundo rápido y nos fuimos hundiendo. Veníamos de Anfield y de Roma, psicológicamente estábamos muy afectados y no supimos sobreponernos. El Bayern era favorito pero yo confiaba en nosotros: jugador por jugador no éramos peores que ellos”.
El silencio del vestuario
Tras el 2-8, en el vestuario y en el hotel había silencio total, no sabíamos dónde meternos
A Sergi Roberto le tocó pasar el antidoping tras el partido, “por lo que cuando regresé al vestuario ya no quedaba nadie. Pero por lo que me contaron nadie dijo nada, silencio total, estábamos destrozados. Y en el hotel, lo mismo: silencio, no sabíamos dónde meternos”.
Su posible salida
“Yo habría entendido que me hubieran dicho que no contaban conmigo, pero desde el principio me reiteraron su confianza en mí”.
Source link