“No se deberían de meter en un saco de adversarios trabajos periodísticos con sustento”, sostuvo Alfredo Figueroa, sobre el reportaje de las casas de Bartlett.
De comprobarse el reportaje que señala que Manuel Bartlett se ha hecho -a través de familiares, empresas y presuntos prestanombres- de un imperio inmobiliario de 25 propiedades (23 casas y dos terrenos), con un valor aproximado de más de 800 millones de pesos, este funcionario tendría que dejar de ser parte del gobierno de AMLO, consideró el ex consejero electoral Alfredo Figueroa.
Hasta ahora, el director de la CFE ha negado que tenga más que lo que reporta en su declaración patrimonial.
“Si hay algún asunto que se tenga que perseguir, actuar ya paradigmáticamente… este sería el primer caso en donde un servidor público de este nivel, si llega a comprobarse, yo estoy seguro que el presidente de la República le pedirá, si termina siendo imputado y hay alguna evidencia de que hay una investigación que tiene sustento, va a tener que salir del gobierno“, señaló en #AristeguiEnVivo.
En un principio, a Figueroa no le gustó la reacción de Bartlett ni de la SFP “frente al reportaje que ha mostrado un conjunto de viviendas que pertenecen a él o a su entorno familiar”.
“La SFP al principio hace un planteamiento de que no lo obtuvo cuando era servidor público, me parece torpe la reacción inicial… me ha parecido bien la rectificación de que se investiguen”, expuso.
Señaló que ese es el cambio de actitud que se esperaría de un nuevo gobierno, el decir “ábrase todo hasta sus últimas consecuencias y lleguemos al fondo del asunto“. Esto luego de que se abrieran investigaciones tanto en la SFP como en la Fiscalía anticorrupción por denuncias presentadas con base en el reportaje “Bartlett bienes raíces”, de la reportera Areli Quintero, presentado en los espacios informativos de Carlos Loret de Mola.
El texto revela que “el personaje principal del entramado inmobiliario de los Bartlett es Julia Elena Abdala Lemus, pareja de Manuel Bartlett. A su nombre han quedado nueve de las 25 residencias que ha adquirido la familia en 20 años”.
“En esta lógica el propio presidente tiene una actitud por un lado de favorecer que se lleven a cabo las investigaciones”, pero mientras no se le demuestre lo sigue respaldando, indicó.
“Me queda claro lo que ha significado el trabajo periodístico de Loret”, pues “tiene muchas cosas reprochables” pero independientemente de eso “no se deberían de meter en un saco de adversarios trabajos periodísticos con sustento”.
“Lo que corresponde en el caso del presidente de la República… es responder con ejercicios democráticos de revisión, de apertura, de transparencia”, aseveró.
“Lo primero que hay que saber es: son de este señor -como está en el reportaje- o no estas viviendas”, apuntó Figueroa.
Por su parte, Gabriel Reyes Orona llamó a no descalificar este tipo de trabajos periodísticos que “independientemente de dónde venga, debe de tener consecuencias”.
Además del reportaje en cuestión, el tema “reprobable” -dijo- es la “subvaluación” de los bienes que sí reporta Bartlett en su declaración patrimonial.
“En los últimos 30 años Manuel Bartlett ha sido fundamentalmente un servidor público que difícilmente podría acumular el caudal de bienes que ha acumulado“, consideró.
“Lo que está haciendo Bartlett es presentar una declaración leonina, en la que él dice cuánto valen las cosas para que ajuste lo que tiene a lo que ha ganado”, opinó.
“Cuando menos uno de sus bienes vale el total de lo que dice que tiene“, aseguró Reyes Orona.
Como sus bienes inmuebles, el director de la CFE registró dos edificios con una superficie construida de 800 y 248 m2, respectivamente, así como tres locales.
“Al margen de que se pueda acreditar o no el origen de los recursos, ya hay un problema de subvaluación que no debería permitir presentar de manera honesta hacia el público un patrimonio como lo está haciendo Manuel Bartlett”, mencionó.
“Hay bienes en los que la subvaluación es grotesca“, refirió sobre la declaración patrimonial de Bartlett.
“Las cifras que nos está dando Bartlett frente a los inmuebles que reconoce como propios no ajusta en la más elemental lógica… debe de arrancarse por una valuación real, correcta de lo que él ya reconoce como propio… porque este expediente de poner bienes a nombre del chofer, a nombre de la sirvienta, no es nada nuevo en este país… no debería agotarse la investigación para decirle es usted o no propietario de este inmueble… además, la acumulación de bienes fue en un plazo muy breve”, señaló.
Esta es la declaración patrimonial de Bartlett:
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