Brittney Griner, una de las estrellas del baloncesto mundial y la WNBA, sigue detenida en Rusia desde el estallido de la guerra en Ucrania. El comisionado de la NBA, Adam Silver, habló anoche de la colaboración con su homóloga Cathy Engelbert para intentar devolver a la jugadora de 31 años a casa lo más pronto posible.
El máximo responsable de la competición estadounidense masculina, empresa matriz de la liga femenina, comentó los pasos que ha seguido la entidad para intentar solventar la situación de Griner, miembro de las Phoenix Mercury.
“Hemos estado en contacto con la Casa Blanca, el Departamento de Estado, negociadores de secuestros, hemos hablado con cada nivel de gobierno y también con el sector privado”, explicó Silver en una entrevista previa al sorteo del draft de 2022. “Nuestra prioridad número uno es su salud y su seguridad, y asegurarnos de que pueda salir de Rusia”.
Según el Departamento de Estado, el contacto con la jugadora sigue siendo irregular, una situación que contraviene la convención de Viena a la que Rusia está adscrita. Según un oficial consular, Griner lleva “tan bien como se puede esperar en condiciones tan adversas” su detención en Rusia.
La jugadora fue retenida en un aeropuerto por llevar encima, supuestamente, un aparato vapeador con cartuchos de aceite de cannabis. La semana pasada, Rusia extendió un mes la detención preventiva de Griner antes de pasar a juicio.