Las empresas están llegando a un punto de inflexión considerable cuando se trata de cómo ensamblan y administran su pila de tecnología de software. Por un lado, la tormenta de cambios de TI relacionados con la pandemia está comenzando a calmarse, pero por otro lado, muchos se enfrentan a una recesión económica que podría afectar y tensar aún más el negocio.
La resiliencia y adaptabilidad de cualquier empresa que sobrevivió a la pandemia es admirable. Pero la dura verdad es que muchas de esas mismas empresas enfrentan un momento de “pagar el precio” a medida que vence el costo de sus decisiones y acciones durante los últimos 18 a 24 meses.
Dicho esto, pocas partes de su pila tecnológica tendrán tanta exposición como las renovaciones de licencias de software.
El tsunami SaaS
La transformación digital llegó rápido para la mayoría de las empresas, ya sea que estuvieran preparadas para ella o no. El cambio al trabajo remoto y la necesidad de escalar rápidamente e incorporar soluciones apuntaban en una dirección lógica: el software basado en la nube. El menor costo de entrada, los requisitos mínimos de infraestructura y la implementación rápida ayudaron a que pasar a una pila de tecnología SaaS fuera la opción clara.
Una de las mejores maneras de ayudar a los administradores de TI a optimizar el proceso de renovación de SaaS es eliminarlo por completo.
En 2021, Deloitte estimó que 94% de las organizaciones usaban algunos productos SaaS basados en la nube. Según nuestra investigación, la organización empresarial promedio ha duplicado su gasto en SaaS desde 2018 y ahora gasta $35,000 en casi 300 herramientas diferentes.
En el calor del momento, muchas empresas se centraron en los desafíos inmediatos que SaaS podría resolver sin comprender realmente cómo esta transformación digital afectaría la forma en que encuentran, compran y administran su pila de tecnología a largo plazo.
Minimizar el agotamiento de la pila ante una recesión
Las juergas de compras de SaaS de 2020 y 2021 han llevado a la fatiga de la pila tecnológica, y los departamentos de TI sienten la presión de administrar un conjunto complejo y diverso de herramientas y justificar el retorno de la inversión frente al aumento de los costos del software.
Las empresas de SaaS utilizaron precios agresivos para afianzarse en las organizaciones que confiaron en ellos y se beneficiaron de ellos durante la pandemia. Muchos han tenido un éxito increíble al ayudar a las empresas a lograr sus objetivos, mejorar la productividad y reconocer el ROI durante tiempos económicos considerablemente difíciles. De hecho, una gran parte de estos productos SaaS se han vuelto omnipresentes. Aquellos con características pegajosas que “no pueden vivir sin él” (piense en Airtable, Monday.com y Slack) buscan aprovechar esos avances cuando llegue el momento de la renovación.
Source link