Se hizo esperar Abelardo para comparecer en la sala de prensa de Mendizorrotza, después de cumplimentar cerca de un cuarto de hora sobre el césped del estadio para dar una vuelta de honor y verle durante muchos minutos con los ojos totalmente vidriosos y llenos de lágrimas que a duras penas pudo frenar el asturiano. Tras pasar por vestuarios llegó a la mesa frente a la prensa, donde mañana volverá a comparecer para despedirse oficialmente y poder ofrecer alguna pista sobre cuál puede ser su siguiente destino futbolístico.“Ha sido increíble. Soy un poco de lágrima fácil, Solo puedo dar las gracias a la afición. No me lo esperaba. He llorado de emoción por el trato del club, cómo me ha tratado la afición y ver a todo el campo de pie. Nos volveremos a encontrar”.
Trató de recordar varios momentos y se acordó de su hijo, presente ayer en Mendizorrotza. No así su mujer ni su hija, ausentes por cuestiones familiares en Asturias. “Son momentos en los que te acuerdas de ellos. He llorado tres veces, ascenso y salvación del Sporting y esta noche en Mendizorrotza. Mira que he ganado títulos con el Barcelona, ganar unos Juegos
Olímpicos o llegar a jugar la UEFA con el Sporting, cuando quedamos quintos una temporada”.Tuvo también tiempo para valorar este año y los puntos obtenidos. “Ha sido una temporada magnífica con esos 50 puntos y con los elogios y premio para los jugadores, las felicitaciones y poder haber tenido una plantilla excelente. Todos han estado a un nivel altísimo. Me alegro por el gol de Wakaso y por los últimos partidos de Vigaray porque les ves entrenar, ser buenos profesionales y los buenos partidos que han hecho. No sé si Wakaso volverá a meter otro gol a bote pronto con la derecha”, terminó bromeando el Pitu en la sala de prensa.
Carteles
para
el
asturiano
En los prolegómenos del partido los espectadores del fondo de animación exhibieron carteles con el lema “Gracias por todo Abelardo”. El preparador gijonés dirigió desde el banquillo albiazul su último partido como preparador babazorro antes de afrontar una nueva etapa a partir de junio desvinculado ya de los albiazules. Al final del partido, en los dos minutos finales, volvieron a aflorar en las manos de algunos espectadores, mientras el colectivo de animación Iraultza
1921 entonó cánticos de apoyo y agradecimiento a Abelardo. El propio entrenador se despidió de sus ayudantes y se acercó a esa grada del campo al terminar el partido y recogió, con emoción, esas alusiones en forma de canción desde la grada. Abelardo llegó en diciembre de 2017 a Gasteiz y fue el artífice de un prodigiosa reacción que le hizo escapar de los puestos de descenso y salvar con holgura la categoría.
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