“Si me das a elegir, habría elegido que la Real ganase la Copa y yo fallar el corte”. Éstas son las sorprendentes declaraciones de Txema
Olazabal tras pasar el corte del Masters de Augusta por primera vez desde 2014. Invitado por sus entorchados en 1994 y 1999, el de Hondarribia se sentía muy emocionado por su éxito en el día en el que su amigo íntimo Seve
Ballesteros habría cumplido 64 años: “Yo creo que Seve estaría contento, echo de menos no tenerle aquí para abrazarnos”.
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Olazabal no ocultó su emoción por la tremenda alegría que experimentó el sábado pasado al ver a su Real Sociedad alzar la Copa del Rey: “Cuando ganó la Real, feliz porque cuando tienes que esperar 34 años para conseguir un título lo aprecias muchísimo más. Quiero dar la enhorabuena a la Real y a todos los guipuzcoanos”, afirmó.
Según la crónica escrita en este diario por Raúl
Andreu, Olazabal, doble campeón en 1994 y 1999, y quien llevaba cinco años seguidos fallando el corte, se aseguró, con 55 ‘tacos’, su continuidad en el torneo y por ende jugar el fin de semana tras firmar una tarjeta de 71 golpes para 146 (+2), la primera bajo par del guipuzcoano desde la que anotó (también 71) en la segunda vuelta del Masters 2015. El hondarribiarra acabó respirando bien tranquilo: 71 golpes (-1) y 146 (+2) en el total, y al sofá a descansar y a ver por la tele lo que sucedía en la sesión de tarde.
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