Luis Suárez no olvidará nunca el 14 de agosto de este 2020. Fue el día que el uruguayo disputó su último encuentro con el FC
Barcelona. En Lisboa. Cuartos de final de la Champions. Frente al Bayern de Munich, equipo al que se mide el miércoles con el Atlético de Madrid en su estreno en esta competición como rojiblanco.
No olvidará esa fecha el charrúa porque además de jugar por última vez con el conjunto azulgrana, algo que no sabía en aquel momento, fue una de las derrotas más duras que ha tenido Suárez en toda su carrera. 2-8 ganó el Bayern, destrozando por completo al equipo entonces dirigido por Quique Setién. Eso sí, el uruguayo no faltó a su cita con el gol, marcando en el minuto 57 el que también iba a ser su último tanto como azulgrana.
Lo de aquella noche pasó a la historia por el tremendo correctivo que recibió el Barcelona. 26 disparos del Bayern, 14 de ellos a puerta, de los que ocho acabaron dentro de la portería. Un auténtico vendaval que se llevó por delante al cuadro catalán y que provocó un enorme terremoto que, entre otras cosas, dio con Suárez en la lista de transferibles.
O de salidas directamente, porque el Atlético estuvo rápido para llevarse al delantero prácticamente regalado. Y ahora, caprichos del destino, Suárez vuelve a medirse al Bayern de Munich poco más de dos meses después de aquella fatídica noche que lo cambió todo y que, sin saberlo, supuso el primer paso para que este miércoles el charrúa vaya a defender la elástica rojiblanca en el Allianz Arena.
ARMA ROJIBLANCA EN MUNICH
Luis Suárez será titular ante el Bayern, en una noche en la que revivirá una pesadilla reciente pero que también afronta con un indudable deseo de revancha. Si Simeone no cambia de planes, formará el ataque junto a Joao Félix, con el que se está a empezando a entender. Su efectividad será una de las armas con las que el Atlético tratará de asaltar al Allianz Arena.
Enfrente estará el campeón de Europa y, probablemente, el equipo más en forma del continente en estos momentos. Pero los colchoneros, con Suárez con ganas de venganza, tendrán mucho que decir. Tres goles lleva el charrúa en cuatro partidos y además, contando los compromisos de su selección, lleva tres encuentros consecutivos viendo puerta.
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