Tablas en un derbi en el que nadie pisó a fondo

Sevilla y Betis sumaron un punto cada uno en un derbi de alto voltaje que acabó sin goles y muy crispado por la entrada destemplada que Miranda protagonizó en la recta final sobre Jesús Navas y que le costó la expulsión al lateral bético y encendió los ánimos de un duelo trabado y en el que fue el Sevilla el que más ocasiones tuvo, sobre todo en la segunda mitad. El empate sirve a los béticos para afianzar su posición en la lucha por Europa y a los sevillistas para seguir en la brecha en busca de la séptima plaza, aunque con la mente puesta ya en su cita del día 31, el sueño de la Séptima.

Con el Sevilla pensando en la final de la Europa League en Budapest, el derbi tuvo muy poco ritmo de inicio. Mendilibar lo demostró con un once en el que la premisa era dar descanso a los que se mataron el jueves ante la Juventus en un partido intensísimo decidido en la prórroga. Sólo tres jugadores repitieron, Gudelj, Rakitic y Óliver Torres, mientras el Betis de Pellegrini afrontaba el duelo con un equipo más reconocible.

Pero el choque tardó mucho en romper el cascarón. Con muchas interrupciones permitidas por Gil Manzano, la primera parte se consumió sin apenas ocasiones y con poca tensión para tratarse de un derbi. Sólo un tiro entre los tres palos, un zurdazo flojo de Pape Gueye, podía contarse entre las aportaciones de ambos equipos. Un par de disparos altos sin peligro, uno por equipo, de Papu Gómez y Guido Rodríguez, y un remate de Rafa Mir en una gran jugada de Óliver Torres que puso el ¡uy! en la grada tras la parada de Bravo, pero la acción estaba invalidada por fuera de juego del gigante cartagenero.

En la segunda mitad sí hubo más emoción y también crispación, sobre todo en la recta final. Pellegrini buscó más profundidad con Rodri, pero se fue diluyendo ante un Sevilla que, sin hincar del todo el colmillo, se acercó más al área rival.

Rafa Mir tuvo la mejor ocasión en un centro del Papu, pero remató mal, mientras que la apuesta por Suso fue la mejor decisión de un Mendilibar que fue sacando a su artillería conforme pasaban los minutos. En-Nesyri, Acuña, Jesús Navas… Un zurdazo de Suso puso en aprietos a Bravo, que después respondió al remate deLamela, que, a diferencia del jueves ante la Juventus, no estuvo fino en sus remates. En-Nesyri y Navas lo pusieron en ventaja, pero en las dos ocasiones no supo resolver.

El derbi acabó y todos quedaron contentos, aunque la tensión se mascó con la entrada de Miranda al capitán sevillista, el punto negro en un duelo en el que Joaquín fue pitado por un Sánchez Pizjuán que desde el primer momento estaba pensando en la final de Budapest.