Los 27 puntos de Jayson Tatum terminaron salvando por los pelos a los Boston Celtics en su visita a la Bahía, que se saldó con una ajustada victoria por 107-111 tras la enésima exhibición de un Stephen Curry en estado de gracia: anoche terminó con 38 puntos, 11 rebotes, 8 asistencias y 3 robos de balón (12-21 TC; 7-14 3P).
El astro local superó la barrera de los 17.000 puntos que le sitúa junto a Wilt Chamberlain como los únicos en haber anotados tantos puntos vestidos con los colores de los Golden State Warriors.
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Una bandeja de Andrew Wiggins, autor de 15 puntos, situó el partido a una posesión de la prórroga con un minuto por disputarse. Tatum no falló desde la línea de personal y Curry falló su intento triple para apretar todavía más las cosas después de haber liderado un intento de remontada a cuatro minutos del final, cuando Boston logró dobles dígitos de ventaja (106-96).
Con la ausencia de Marcus Smart, los Celtics fueron irregulares en el juego y en ataque. Jaylen Brown sumó 18 puntos y 10 rebotes para acompañar el buen partido de Tatum y romper una racha de dos derrotas para los visitantes.
El enfrentamiento también estuvo marcado por las baja de James Wiseman, con una torcedura de muñeca. Durante el partido, el pívot titular Kevon Looney se torció el tobillo y no reapareció en la segunda mitad.
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Con ambos equipos empatados a 52 al descanso tras dos cuartos opuestos (24-35 y 28-17), la diferencia en el rebote acabó decantando la balanza. Boston superó 51-36 a su rival en este apartado. “Nos mataron en el rebote en la segunda mitad, esa fue la gran diferencia del partido”, explicó Steve Kerr.
Los Warriors contaron con el buen papel de Juan Toscano-Anderson (16 puntos) desde el banquillo pero echaron una vez más de menos un mayor porcentaje de acierto de sus titulares (6-16 para Wiggins y 5-11 para Oubre Jr.)
Los Celtics contaron con más jugadores en dobles dígitos: Kemba Walker logró 19 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias, Tristan Thompson dominó la pintura con 13 tantos y 8 rebotes y Grant Williams completó el trabajo desde el banco con 15 puntos.
Boston mantiene un récord irregular en el Este con 11 victorias y 8 derrotas en una temporada en la que ven como otras fuerzas como los Nets y los 76ers suben su apuesta en la lucha por la primera plaza de conferencia.
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