En Madrid esperaban con muchas ganas este mal llamado Clásico. Incluso Florentino Pérez se sentó en el palco, esperanzado de ver el primer triunfo de su Real Madrid ante el FC Barcelona, que llegaba tocado por las bajas. Pero el choque acabó con goleada culé y las lágrimas de Misa, que evidenciaban la frustración y la humillación sufrida.
En el Barça también les tenían especialmente señalado este partido. Después del plante a la selección de Vilda de 15 jugadoras, entre ellas todas las culés, las internacionales del Rea Madrid, que finalmente aceptaron seguir en el equipo nacional, lideran ahora la nueva ‘roja’. Y eso en el Barça lo llevan clavado.
Se lo guardan y en algunos casos a afectado seriamente a la s relaciones personales porque se sienten traicionadas. Tanto es así que Aitana Bonmatí no quiso saludar al final del partido a la propia Misa, que se lo recriminó. Fuentes del entorno de la futbolista azulgrana explican a MD que fue la portera madridista quien buscó a la catalana para recriminarle con malas palabras que no le hubiera saludado al principio del partido. La reacción de la centrocampista del Barça fue marcharse hasta donde estaba su equipo para evitar más polémica porque sí la había saludado inicialmente como al resto de sus rivales.
Alexia y las lesionadas, en Madrid
El Barça celebró el triunfo. Con todas sus jugadoras en el césped. También las lesionadas. Alexia, Bruna, Jana, Cata Coll, Codina y Emma se desplazaron a Madrid para apoyar al equipo.
La afición culé, que se hizo notar como la local en Valdebebas, ovacionó a las suyas, mientras que parte de los seguidores madridistas les dedicaban cánticos fruto de la rabia producida por la derrota. “No vais al Mundial” o “Vilda quédate”. No es un Clásico del fútbol femenino, pero sí son los eternos rivales. Quedo claro.