Desde 2017, Flynn había tratado de retirar su declaración de culpabilidad, afirmando que los fiscales violaron sus derechos y lo engañaron para aceptar un acuerdo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, indultó el miércoles a su exasesor de seguridad nacional Michael Flynn, quien se declaró culpable de mentir al Buró Federal de Investigaciones (FBI) durante la investigación sobre la intromisión rusa en las elecciones presidenciales de 2016.
“Es un gran honor para mí anunciar que al general Michael T. Flynn se le ha concedido un perdón total. ¡Felicitaciones a @GenFlynn y su maravillosa familia, sé que ahora tendrán un Día de Acción de Gracias realmente fantástico!” escribió Trump en Twitter.
It is my Great Honor to announce that General Michael T. Flynn has been granted a Full Pardon. Congratulations to @GenFlynn and his wonderful family, I know you will now have a truly fantastic Thanksgiving!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 25, 2020
Flynn, un general retirado del ejército, se declaró culpable en 2017 de mentir al FBI sobre las interacciones que tuvo con el embajador de Rusia en Estados Unidos en las semanas previas a la toma de posesión de Trump en enero de 2017.
Desde entonces, ha tratado de retirar la declaración de culpabilidad, argumentando que los fiscales violaron sus derechos y lo engañaron para que aceptara un acuerdo. Su sentencia se ha aplazado varias veces.
Fue el perdón de más alto perfil otorgado por Trump desde que asumió el cargo. Entre otros, el presidente republicano ha indultado al personal del Ejército acusado de crímenes de guerra en Afganistán y a Joe Arpaio, ex alguacil de Arizona y de línea dura contra la inmigración ilegal.
Flynn se desempeñó como el primer asesor de seguridad nacional de Trump, pero el presidente lo despidió a principios de 2017 después de solo 24 días cuando estalló una controversia sobre los contactos del ex general con el entonces embajador ruso Sergei Kislyak.
Flynn fue uno de los varios exasistentes de Trump que se declararon culpables o fueron condenados en un juicio en la investigación del exfiscal especial Robert Mueller sobre la interferencia de Moscú en las elecciones estadounidenses de 2016 para impulsar la candidatura de Trump. Rusia negó haberse entrometido.
Trump dijo en marzo que estaba considerando seriamente un perdón total para Flynn. Dijo que el FBI y el Departamento de Justicia habían “destruido” la vida de Flynn y la de su familia, y citó un informe no especificado y sin fundamento de que habían perdido registros relacionados con Flynn.
Se suponía que Flynn ayudaría a cooperar con el gobierno como parte de su acuerdo de culpabilidad. Pero luego cambió de abogado y de táctica, argumentando que los fiscales del caso lo habían engañado para que mintiera sobre sus conversaciones de diciembre de 2016 con Kislyak.
El Departamento de Justicia ha negado repetidamente las acusaciones de mala conducta de la fiscalía, y el juez del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos, Emmet Sullivan, rechazó todas las afirmaciones de Flynn en diciembre de 2019.
Los fiscales federales habían pedido al juez en enero que condenara a Flynn a hasta seis meses de prisión, argumentando en un expediente judicial que “el acusado no ha aprendido la lección. Se ha comportado como si la ley no se aplicara a él y como si sus acciones no tuvieran consecuencias “.
Flynn también se desempeñó como jefe de la Agencia de Inteligencia de Defensa del Pentágono, pero fue expulsado en 2014 en parte debido a su estilo de gestión y sus opiniones sobre cómo luchar contra la militancia islamista.
Se unió a la campaña electoral de Trump en 2016 y en la Convención Nacional Republicana de ese año dirigió a los partidarios en cánticos de “enciérrenla”, en referencia a la candidata demócrata Hillary Clinton.
Otros ex asistentes de Trump fueron condenados por delitos federales tras la investigación de Rusia. El viejo amigo y asesor de Trump, Roger Stone, fue sentenciado el 20 de febrero a tres años y cuatro meses de prisión por obstrucción de la justicia, manipulación de testigos y mentir a los legisladores que investigan la interferencia electoral rusa.
Paul Manafort, ex presidente de campaña de Trump, fue sentenciado el año pasado a tres años y medio de prisión luego de ser declarado culpable de cabildeo ilegal y manipulación de testigos, lo que combinado con una sentencia en un caso relacionado equivalía a un período de más de siete años tras las rejas. (Rts)