Ícono del sitio La Neta Neta

Trump y Kim Jong-un se reúnen entre las dos Coreas



El presidente de EE UU, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, se han reunido este domingo en la Zona Desmilitarizada (DMZ), la franja fronteriza entre las dos Coreas. En un breve encuentro, ambos se han dado la mano sobre la línea de demarcación antes de cruzar juntos hacia territorio norcoreano. Esos breves segundos han convertido a Trump en el primer presidente de EE UU que pisa suelo de ese país.
Tras volverse a dar la mano en territorio del norte, Trump y Kim caminaron juntos, y sonrientes, para volver a cruzar la línea de demarcación hacia el Sur. Si hace poco más de un año, en la primera cumbre intercoreana con el presidente del Sur, Moon Jae-in, el líder del Norte parecía visiblemente nervioso, en esta ocasión se mostraba mucho más relajado, e intercambió alguna carcajada con Trump.
En unas breves declaraciones en suelo del Sur, y antes de pasar a una reunión privada con el líder del Norte, Trump aseguró que “están pasando muchas cosas positivas” en el proceso de conversaciones entre Washington y Pyongyang. Destacó también su buena relación personal con Kim desde su primera cumbre el 12 de junio de 2018 en Singapur: “Nos hemos caído bien desde el primer día”. El líder norcoreano no hizo declaraciones.
Pocos minutos antes, durante un recorrido por el puesto de observación Oulette, desde donde pudo observar territorio norcoreano, Trump había comentado que esa zona “solía ser muy, muy peligrosa”. Para aclarar a continuación: “Pero tras nuestra primera cumbre, todo el peligro ha desaparecido”.
El encuentro, en un entorno enormemente simbólico, es el tercero entre Trump y Kim en un año y podría dar pie a relanzar las estancadas conversaciones sobre el programa nuclear de Corea del Norte. El presidente surcoreano había confirmado oficialmente la reunión entre los dos líderes horas antes en una rueda de prensa con Trump en Seúl. “Los líderes de Estados Unidos y Corea del Norte se darán un apretón de manos por la paz en Panmunjom, el símbolo de la división”, había declarado Moon. 
Panmunjom, apodada la “aldea de la paz”, es el punto en la Zona Desmilitarizada donde se firmó el armisticio que puso fin a la guerra de Corea (1950-53) y donde se han llevado a cabo más de 800 rondas de conversaciones entre los dos vecinos. Es también el lugar donde, el año pasado, Moon y Kim se dieron la mano para saltar juntos a suelo norcoreano, en una imagen que dio la vuelta al mundo, durante su primera cumbre intercoreana. Aquella reunión abrió el camino para el proceso de negociación entre Pyongyang y Washington.
Trump había propuesto el encuentro públicamente a través de un tuit el sábado desde Osaka (Japón), donde participaba en la cumbre del G20. Moon confirmó este domingo que Kim había aceptado la propuesta. El apretón de manos, afirmó, sería un “hito significativo” en el proceso de desnuclearización de la península coreana. Poco antes, el presidente estadounidense, que presume de su buena sintonía personal con el líder norcoreano, había declarado que daba los últimos toques a una reunión “muy breve” con Kim.
El sábado, durante una rueda de prensa en Osaka, el inquilino de la Casa Blanca había asegurado que no tendría “ningún problema” en cruzar al otro lado de la línea divisoria, como hicieron Moon y Kim. Trump había querido visitar la Zona Desmilitarizada en 2017, durante una visita anterior a Corea del Sur, pero el mal tiempo le obligó a abandonar esos planes.
Las conversaciones entre Estados Unidos y Corea del Norte sobre el programa nuclear de Pyongyang se encuentran estancadas desde el fracaso de la cumbre previa entre Kim y Trump, en Hanói el pasado mes de febrero. Entonces quedaron de manifiesto las profundas diferencias en las posiciones de cada Estado. Washington proponía un desarme completo y verificable de Corea del Norte, a cambio del levantamiento parcial de sanciones. Pyongyang ofrecía desmantelar su centro nuclear de Yongbyon para que EE UU retirara esos castigos.


Source link
Salir de la versión móvil