Por todos es sabido que Eduardo Chillida, antes que artista fue portero. Y lo fue en la Real, donde se tuvo que retirar de forma prematura por una grave lesión. El artista esculpió el Peine del Viento en 1977, en su madurez, con lo que imaginen el tiempo que ha pasado desde que se ponía bajo la portería realista, con la mayoría de edad recién cumplida. Pues bien fue entonces, con él como guardameta, cuando el conjunto txuri urdin logró por última vez una victoria como visitante tan abultada como la que firmó el jueves por la noche en Becerril.
Era la posguerra en España. Europa se desangraba en plena Segunda Guerra Mundial y aquella Real, dirigida por el legendario Benito Díaz, estaba dando sus primeros pasos hacia el regreso a Primera División. La semana anterior le hizo un 8-2 al Sabadell y en plena incontinencia le metió otros ocho a la Ferroviaria el 18 de octubre de 1942. Este club, que aún compite en la Tercera Categoría de Aficionados, vivía sus años dorados y disfrutó en la época de sus únicas tres temporadas en Segunda División. Pero aquella tarde de octubre del 42 fue devorado por una Real en la que Unamuno (3), Bidegain (3) y Ontoria (2) firmaron una goleada a domicilio que no encontró réplica hasta el jueves en La Balastera. El jueves fueron Januzaj (3), Isak (2), Barrenetxea, Pardo y Le Normand quienes tomaron el testigo anotador que permite revivir aquella tarde madrileña.
Han pasado 28.186 días desde entonces, más de 77 años, centenares de jugadores y rivales para que la Real vuelva a lograr la gesta de ganar por ocho goles de diferencia. Claro que en esta ocasión el rival no era de la misma categoría, como sí lo era la Ferroviaria madrileña.
Otras goleadas en Copa Regional
El 0-8, no obstante, no es la mayor goleada oficial de la historia txuri urdin, aunque para encontrar una superior hay que remontarse casi un siglo en el tiempo y explicar que por aquel entonces el fútbol, en plena fase de creación, tenía un sistema de competición muy diferente al actual.
La mayor goleada de la historia de la Real fue un 0-9 ante el Euskalduna en la temporada 30/31. Era un partido correspondiente a la Copa Regional, que era una fase previa de la Copa de España. En ese torneo, el club guipuzcoano consiguió otros dos 0-8, ambos durante los primeros años de su historia. La Real se impuso por el mismo resultado que se dio en Becerril en la temporada 1915/1916 al Portugalete y al Tolosa en la 38/39.
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