Los Golden State Warriors están a una victoria de las Finales del Oeste tras ganar anoche a Memphis Grizzlies por 101 a 98 en un vibrante encuentro que no se terminó de decidir hasta los últimos instantes y en el que los visitantes echaron en falta al lesionado Ja Morant.
La ausencia de última hora de Steve Kerr, que dejó el equipo en manos de Mike Brown tras dar positivo por COVID-19, no trastocó en exceso los planes de unos Warriors que fueron de menos a más y dejaron el trabajo para última hora, en un cuarto periodo donde se pusieron por primera vez por delante.
Sin embargo, los Warriors no dejaron margen para que Memphis se escapase en ningún momento. La primera parte fue lenta, con ambos equipos atascados en ataque y menos de 80 puntos anotados en total.
Jaren Jackson Jr. tomó el relevo de Morant, baja tras la lesión que sufrió en su rodilla en el último encuentro que disputaron estos equipos, y terminó como máximo anotador de los suyos con 21 puntos. Estuvo desacertado en el triple (0/7) pero imperial en defensa (2 robos y 5 tapones).
Tuvo el apoyo de Kyle Anderson con 17 puntos desde el banquillo y un Tyus Jones al que le tocó hacer, en la medida de lo posible, las veces de Morant en la posición de base. Terminó con 19 tantos, 6 rebotes y 5 asistencias, aunque lejos del impacto de Ja.
En los Warriors primó la calma. No tenían ninguna prisa por hacer las cosas rápido y se dejaron llevar por el ritmo del partido hasta que vieron la ocasión de dar su golpe. Los de la bahía entraron al último cuarto con una desventaja de 7 puntos y ahí se pusieron a trabajar.
Steph Curry acabaría la noche con 32 puntos y convirtiéndose en el primer jugador en sumar 500 triples en su carrera en playoffs, mientras que Andrew Wiggins destacó como el segundo máximo anotador del equipo (17) y un diferencial de +12 en cancha que certificó los buenos momentos de Golden State.
Fue una noche más discreta para otro de los hombres importantes de los Warriors, una en la que Klay Thompson sufrió para encontrarse cómodo y erró los siete intentos de triple que tuvo.
Memphis vuelve ahora a su casa con la serie al borde del abismo. Una derrota supone el final de su camino esta temporada y un triunfo les permite soñar con la machada en un hipotético Game 7 a la vuelta de otro paso por San Francisco.