Un Doncic muy sobrado vuelve a su nivel ante los Pelicans y recibe otra gran noticia

Un Doncic muy sobrado vuelve a su nivel ante los Pelicans y recibe otra gran noticia

Suele maravillar, sobre todo en los tiempos recientes, por abundancia y derroche, pero anoche lo hizo por una elegante sobriedad. ‘Pausado’ por los Boston Celtics -ahora mismo el mejor equipo de la NBA y también mejor capacitado para eclipsarle-, Luka Doncic se ‘reanudó’ contra los New Orleans Pelicans en la balsámica victoria de Dallas tras lo de Boston (127-117). Lo hizo al ralentí, con el generoso triple-doble de turno -34 puntos (10/23 en tiros de campo), 10 rebotes y 10 asistencias-, pero sin estridencias, más maña que fuerza, sin abusar del contacto ni correr en exceso para no exigirse más de lo necesario, duda antes del partido por su tocado tobillo, que quizá le hacer perderse el partido de esta próxima madrugada contra Oklahoma. Victoria práctica y de moral del cuarto contra el tercero del Oeste.

No convenía ‘matarse’ por su estado físico ni se lo exigieron unos Pelicans que nunca fueron una amenaza, demasiado limitados, sin Brandon Ingram, Zion Williamson y, esta vez, también sin CJ McCollum. Y para la franquicia de Louisiana, ‘hecha’ ya a la ausencia de Ingram, ya fue demasiado, además de no tener su principal productor de punto -Williamson-, a su director de juego titular, McCollum. Así que la sucesión de los hechos tampoco iba a exigir ni tampoco ‘enfadar’ más de lo normal a Doncic. Pese al mate que clavó Willy Hernangómez en su presencia.

De nuevo sin Larry Nance Jr. por unas molestias de hombro, el pívot volvió a tener minutos tras quedarse en el banquillo contra los Brooklyn Nets, aportando 6 puntos con un 3/6 en lanzamientos, hasta 10 rebotes, 1 asistencia y 1 tapó en 15 minutos. 

Pero no fue un día más para Luka. Aparte de volver a sus prestaciones habituales, lo que por otra parte se podía esperar, recibió una gran noticia: la de Jarden Hardy, 15 puntos con un 7/9 y un cuchillo en penetración. Apenas un día después del despido de Kemba Walker -otro que, como Campazzo, no superó la prueba como ‘segundo de a bordo’ del esloveno-, el ‘rookie’ le vino a decir que puede contar con él repitiendo los 15 tantos que ya firmó contra los Celtics. Por el momento la franquicia de Texas confía en el número 37 del draft como uno de los que colaboren en la tan compleja ‘causa’ de reemplazar al ex del Real Madrid cuando no esté en pista, además de Spencer Dinwiddie, 12 puntos anoche.

La principal preocupación de los Mavericks se concentró en Naji Marshall (24 puntos), y más aún Jonas Valanciunas, 25 tantos con un 10/13 en tiros y 10 rebotes. Pero la mayor preocupación fue, a la vez, el gran ‘chollo’ para Doncic, que hizo lo que quiso para superar al lituano en el ‘pick and roll’ y casi sin necesidad de ir a chocar con él. La defensa hundida del ‘center’ tras salida de bloqueo de Luka le daba demasiado tiempo para maniobrar.

Cuando el esloveno, forzado a ir a la izquierda no jugueteaba con el ‘snake screen’ con el defensor del manejador -bloqueándolo con la espalda-, para cambiar el balón a su mano derecha -la más hábil-, para buscar un buen tiro o asistencia, penetraba hasta la pintura con un compañero poniendo el bloqueo ciego a Valanciunas para impedir que el lituano saltara.

Cuando optó por asistir, Doncic ‘rompió’ en varias ocasiones al lituano con un pase bombeado a su espalda para un corte de su compañero. Casi que la única vez que Valanciunas cambió en el pick and roll para quedarse con él en el perímetro, el esloveno le dejó claro que eso ‘no lo podía hacer’: triple. Entre el perímetro, algún que otro tiro de media distancia y las asistencias atrayendo desde un poste al que tampoco acudió demasiado para no desgastarse más de lo necesario, Luka Doncic completó su ‘faena’ habitual. Y aunque los Pelicans no le hicieron casi ni una doble ayuda, llegó igualmente a los dos dígitos en pases de canasta (10). Christian Wood le volvió a demostrar mucho de nuevo con 28 puntos, igual que Tim Hardaway Jr. (18).

Los Pelicans se enredaron ante la zona de los Mavericks, sin que alcanzara la aportación de Marshall, el aprovechamiento de las transiciones o un Valanciunas que sacó ventaja de su mayor envergadura cerca del aro ante Wood y Powell y hasta le dejó la suya también a Doncic, con un mate con el astro defendiéndole. Nada que en ningún momento pudiera hacer cambiar el rumbo del partido porque con un 5/29 desde el perímetro (17%) se antoja bastante complicado ganar un encuentro en la NBA.

Willy se vio bien defendido con Dallas tapándole bien en las continuaciones cortas que tanto gustan al español, pero, con sus variados bloqueos y sus mano a mano, el pívot fue de los que más fluidez dio a los encallados ataques en estático de New Orleans, impotente ante la versión productiva pero ‘calmada’ de Doncic. El mayor de los Hernangómez, más agresivo en la defensa del bloqueo directo sin hundirse tanto, pareció intimidar más al base en los pocos duelos que mantuvo con él. 

Si Luka se dio un paseo o no en el parque el día anterior para recuperarse como hiciera después de otro mal partido esta temporada en noviembre -de los pocos que ha tenido-, el esloveno, sobrado, se lo pudo dar también en New Orleans.


Lee también

Toni Canyameras




Source link