MIAMI, Florida – Un “ejército” de 6,000 personas trabaja en el Hard Rock Stadium, de Miami, Florida, en los preparativos de la edición 54 del Super Bowl, que en febrero acogerá a más de 60,000 espectadores solamente en el coliseo donde se celebrará el partido entre los Kansas City Chiefs y los San Francisco 49ers.
“Tenemos operativas a 6,000 personas trabajando para conseguir que este espacio esté listo”, aseguró el director de planificación de eventos de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), Eric Finkelstein.
“Hasta el domingo del Super Bowl (2 de febrero), las personas que trabajan son miles, es un ejército de gente el que se encarga de los diferentes dispositivos”, explicó Finkelstein.
Esta será el undécimo Super Bowl que se jugará en Miami, y tanto a pie de campo como en los alrededores del estadio multideportivo, ubicado en el suburbio de Miami Gardens, al norte de Miami, se ultiman los detalles de seguridad y de infraestructuras.
Se trata de uno de los eventos deportivos más importantes del año en Estados Unidos.
“Siempre hay preocupaciones de seguridad, especialmente en eventos de gran calibre como el Super Bowl, pero creemos que tenemos los planes correctos en funcionamiento y tendremos todo el apoyo que necesitaremos de las autoridades. Unos planes que ya hemos tenido durante años”, advirtió Finkelstein.
Desde la organización aseguran que todavía “queda mucho camino por recorrer” hasta la final del 2 de febrero, pero el hecho de que cada año el evento se celebre en una ciudad diferente hace “única” la final.
“Cada año el Super Bowl es único. Nosotros lo vemos como oportunidades de ciudad a ciudad. Lo que tenemos que coordinar en Minnesota es muy diferente a lo que tenemos que coordinar en Miami”, indicó el director de eventos.
Los preparativos dentro del estadio comenzaron el pasado 2 de enero, después de que terminara la Orange Bowl, un evento en el que cada año se enfrentan dos equipos universitarios de la División I de la NCAA.
Un ejemplo de todo el trabajo que acarrea la infraestructura de este partido son las 4,5 millas de vallas que se han tenido que colocar alrededor del estadio durante estas semanas, o el césped que ha sido necesario instalar debido a que es específico para las finales de esta disciplina deportiva.
“No importan a dónde vayamos o lo que hayamos organizado para ese evento, trabajamos con años de adelanto para sacar sin problemas el gran éxito que es el Super Bowl”, reiteró a pie de campo Finkelstein.
Como todos los años, uno de los platos fuertes del evento es el espectáculo del descanso, que en esta edición contará con Shakira y Jennifer López como artistas invitadas. Las divas latinas ya se encuentran en la ciudad ensayando para el partido, según señalaron fuentes de la organización.