Un gran Nico Melamed lidera el triunfo del Espanyol

El Espanyol logró este miércoles una celebrada y sufrida victoria ante el Cartagena que le aúpa de nuevo al liderato en un partido que cambió como de la noche al día con la entrada de Nico Melamed en el 66’, el indiscutible protagonista de una remontada de oro. Y el Espanyoll vuelve a ser primero tras enlazar dos victorias.

El Cartagena se había avanzado, pero el canterano perico firmó primero el empate con un golazo y provocó el penalti que transformó RDT para poner el 1-2.

Y la guinda la puso Javi Puado, otro de los que salió en la segunda parte, para hacer el tercero y firmar la sentencia con un golazo. Cambios providenciales los que hizo el técnico en la segunda parte.

Una abultada victoria que no esconde la decepcionante primera parte de un Espanyol que debió verse por debajo en el marcador para ponerse las pilas y que no supo ‘matar’ hasta que no entró Nico en el campo, el jugador que cambió el duelo, revolucionando un duelo que se atragantaba.

Vicente Moreno hizo cambios en su once, pensando ya en la cita ante el Sporting del domingo. Keidi Bare y Darder fueron las novedades, quedándose en el banquillo David López y Melendo.

Los primeros minutos fueron de ida y vuelta, con poca pausa e imprecisiones, sobre todo en una medular perica que no arrancaba bien. Darder, en el 10’, dio el primer aviso pero su disparo salió alto. Y la réplica la dio Rubén Castro en el 13’, pero Diego López se lució con una buena estirada.

El duelo devino trabado, sin continuidad y al Espanyol le costaba Dios y ayuda enlazar tres pases seguidos, viéndose un pulso muy equilibrado. A partir de la media hora, el once perico metió una marcha y tuvo dos ocasiones. La más clara la tuvo Wu Lei en el 28’,
tras una deliciosa asistencia de RDT, pero en el uno contra uno con el portero, el ariete la envió fuera, lamiendo el poste con su disparo mordido.

Embarba tuvo otra dos minutos después, mientras que el Cartagena mostró los dientes antes del descanso. Carrasquilla dio mucha guerra pero fue Rubén Castro el que pudo abrir el marcador en el 43’. Partido muy parejo y un Espanyol que no estaba demostrando que es uno de los favoritos de la categoría.

La segunda parte no pudo empezar peor para el Espanyol. Elady se plantó ante Diego López pero el meta gallego le robó el balón de los pies, pero no blocó bien y el delantero local lo fusiló a placer, con la portería vacía: 1-0

Bofetón brutal para un Espanyol en la reanudación y con David López en el campo por Keidi Bare.

Con el gol en contra, los catalanes se pusieron las pilas y empezaron por fin, a apretar en ataque. Así en apenas tres minutos se dieron dos travesaños. En el 54’, gran ocasión de Lluís, cuyo cabezazo lo escupió la madera. Y un minuto después, Embarba se sacó un obús de falta que repelió la cruceta del travesaño. Ahora sí que achuchaba el Espanyol, encerrando a los murcianos a la desesperada.

La entrada de Nico, agua de mayo

De Tomás tuvo un para de ocasiones de cabeza, la más clara en el 71’. Pero la clave del partido fue la entrada de Nico Melamed, providencial y determinante el joven canterano. Salió en el 66’ y en cinco minutos, los que fueron del 75 al 80, Nico le dio la vuelta al marcador con dos genialidades.

En el 75’, tras un gran pase de Embarba, firmó el empate con un disparo seco de primeras, inapelable. Y cinco minutos después, se coló por la banda izquierda y José Ángel lo tuvo que trabar para que no se metiera hasta la cocina. Penalti que transformó De Tomás.

Y todavía faltaba el tercero, el de la sentencia, que lo hizo otro de los cambios de Vicente Moreno en la segunda parte. La buena presión de Darder y Puado provocó la pérdida de balón local. El delantero se fue como una bala y definió de lujo poniendo el 1-3 en el luminoso.

Javi Puado tuvo el cuarto en un final enloquecido, pero su disparo lo repelió el travesaño, el tercero de la noche.

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