Hasta que no aterrice Victor Wembanyama en América -y se ponga a demostrar con tanta celeridad como lo está haciendo él-, Paolo Banchero es lo más parecido a LeBron James que habrá. Apenas ha empezado su vida en la NBA pero ya tiene a todos encandilados a todos el número 1 del draft de este año, un prodigio de versatilidad que se empeña en emular al ‘Rey’.
Lo hizo en el estreno, con cifras de un debutante que no se veían desde el propio LeBron y también de Kareem Abdul-Jabbar. Lo hizo también anoche a pesar del dramático desenlace de sus Orlando Magic contra los Sacramento Kings de Jordi Fernández, victoriosos en la última jugada de la prórroga (126-123): es el único adolescente en la historia de la NBA junto a ‘Bron’ en apuntarse más de 30 puntos y 15 rebotes en un partido. Banchero se desencadenó hasta los 33 tantos con una notable serie de tiro (14/26), 16 capturas, 4 asistencias y un tapón.
El ala-pívot, calcó, además las cifras del ‘6’ en su año de rookie, con también 33 puntos y 16 capturas. La única diferencia, es que el actual jugador de los Lakers era algo más joven en aquel curso 03/04 con 18 años y 334 días por los 19 años y 358 días de Banchero. En cualquier caso, las números del Banchero ‘rookie’ están por encima de las del LeBron novato en sus 10 primeros partidos en la NBA con 23 puntos y 8,5 rebotes de media por los 16,8 tantos y 7 capturas que sumaba entonces ‘Bron’, con más asistencias (6,4 frente a 3,6 del fenómeno de los Magic). El nombre del último ‘rookie’ con los registros de Banchero le deja también por las nubes: Shaquille O’Neal.
“Banchero es especial, se merece el número 1 del draft, me encanta su actitud”, dijo Draymond Green hace unos días. Otros de los datos que asombran del ala-pívot de Seattle es que esta temporada ha firmado más partidos de por lo menos 20 puntos y 10 rebotes que otros poderosos y contrastados hombres de pintura como Joel Embiid, Rudy Gobert, Domantas Sabonis, Nikola Vucevic y Bam Adebayo.
Kings – Magic, un final increíble
Pero Banchero no fue la única noticia en el vibrante Magic-Kings, que tuvo un final de esos de cuento, heroico, de crisol de pasiones, la más absoluta euforia para unos y la más desoladora decepción para los otros. Con 2,5 segundos por jugar de la prórroga, recién empatado el partido por los Magic tras una canasta al límite después de una presión de toda pista, y cuando parecía que el partido se metía en otro tiempo extra, ¡zas!, triple de media pista de De’Aaron Fox, brutal con sus 37 puntos seguidos de los 25 de Sabonis. En los Magic, Franz Wagner fue el siguiente tras Banchero con 31.
Alegría final desenfrenada para los Kings, en los que el catalán Jordi Fernández ejerce de entrenador asistente de Mike Brown. Pero, a pesar de perder, el gran ganador fue Paolo Banchero. No es algo cualquiera ser un reincidente en algo como imitar a LeBron.