Un triple de Zach LaVine a diez segundos de la conclusión sentenció el intenso duelo entre los Chicago Bulls y los Portland Trail Blazers, resuelto por un ajustado 108-111 después de una gran remontada del conjunto de Illinois y un intento a la desesperada de Damian Lillard, que acertó de tres y colocó a un punto a los Blazers a falta de cinco segundos del final.
Coby White, con dos tiros libres, aseguró el triunfo de unos Bulls que siguen dando pasos en la buena dirección a pesar de contar con varias bajas por un brote de Covid-19. Frente a su ídolo en el instituto, White lideró a a Chicago con 21 puntos y 10 rebotes.
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“En el instituto quería ser como Dame”, confesó White antes del encuentro. “Jugar contra los grandes jugadores saca lo mejor de ti”. No se equivocaba el joven jugador de segundo año, que hizo uno de sus mejores partidos del curso ante su ídolo.
Lillard, por su lado, lideró con 24 puntos y 9 asistencias a Portland junto a CJ McCollum, autor de 26 tantos y artífice del gran inicio de partido de los locales, que se colocaron 39-21 arriba al final del cuarto inicial.
La lluvia de triples de los Blazers no desanimó a unos Bulls que cotizan al alza después de haber arrancado el curso con tres derrotas consecutivas. Ahora acumulan cuatro victorias en sus último cinco encuentros.
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“No hemos dejado de jugar”, apuntó LaVine, que contra los Mavericks enchufó 39 puntos y anoche tuvo la sangre fría de sentenciar el choque en los minutos finales. “Arrancaron metiendo canastas difíciles, no es que estuviéramos jugando mal. Son cosas que pasan en un partido. Tras un tiempo muerto dijimos que había que seguir jugando pasara lo que pasara”.
Lo que pasó es que los Bulls remontaron y apabullaron a Portland, que de repente se vio sin pólvora en el segundo cuarto. Sin Lauri Markkanen, Ryan Arcidiacono, Chandler Hutchinson y Tomas Satoransky por culpa del coronavirus, Chicago ha encontrado el clic en su juego.
Hasta siete jugadores de los Bulls anotaron en dobles dígitos. LaVine metió 18 tantos y repartió 9 asistencias para acompañar el partido de White ante su ídolo Lillard, mientras que Otto Porter Jr. constató que es un interior solvente en esta liga con 19 puntos y 13 rebotes.
No hay mal que por bien no venga, y eso lo constatan a la perfección unos Bulls que no han bajado los brazos a pesar de todas las bajas.
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