Una niña migrante de ocho años ha muerto ahogada en el río Bravo a su paso por Ciudad Juárez, en el Estado de Chihuahua, en la frontera de México con Estados Unidos. Una cuadrilla de bomberos ha recuperado su cuerpo del cauce este lunes. La menor, de origen guatemalteco, cruzaba el río Bravo junto a su madre cuando las fuertes corrientes las separaron. Ambas intentaban cruzar a Estados Unidos. Según un comunicado de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, la mujer que perdió a su hija recibirá atención psicológica y medidas de asistencia a través de la Unidad de Atención a Víctimas, en tanto se resuelva su situación jurídica.
Debido a las intensas lluvias en Chihuahua, el nivel de agua del río ha aumentado, algo que ha dificultado el paso a todos las personas que lo intentan cruzar en esta zona. La región vive un flujo migratorio récord a Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) ha interceptado a más de 1,6 millones de personas desde octubre pasado. Además, México recibió un récord de más de 58.000 solicitudes de refugio en la primera mitad de 2022, un incremento anual de casi 15 %, según la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
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