Unos Hawks al alza se deshacen de los Lakers

Ya lo dicen los jugadores, que jugar en horario europeo no termina de convencerles. Eso debieron pensar anoche los Lakers, que vieron como unos Hawks en racha se llevaron un gran triunfo del Staples Center por 99 a 94 en un encuentro en el que la peor noticia para los angelinos no fue la derrota, sino la lesión de LeBron James.

Atlanta llegaba en racha, con siete victorias consecutivas bajo el brazo y buscando la octava en una cancha difícil y ante un rival de la entidad de los actuales campeones. LeBron también estaba en racha, poniendo el lazo a una semana en la que ha vuelto a recordar su máxima candidatura al MVP.

Sin embargo, el Rey solo pudo opositar durante unos minutos. Apenas once duró sobre la cancha, tras caer en una acción del segundo cuarto y dolerse de su tobillo. De inmediato se encendieron las alarmas y aunque James hizo amago de seguir jugando, no tardó en irse a vestuarios. No volvió a jugar.

Horas después los Lakers indicaron que las pruebas de radiología en el tobillo habían resultado negativas, descartando una lesión mayor. Habrá que esperar a mañana para saber el resultado de la resonancia magnética y poder conocer el alcance del daño sufrido.

Mientras tanto, Atlanta dio muestra de su gran profundidad de plantilla. No fue la mejor noche de Trae Young, ni tampoco la de Clint Capela. Y sin embargo, los Hawks se las arreglaron para sacar adelante un partido tosco pero inteligente.

John Collins, que está en estado de gracia, lideró el esfuerzo colectivo de los de McMillan con 27 puntos, 16 rebotes y un buen despliegue defensivo con 3 robos y 3 tapones. Apenas falló 4 lanzamientos al aro, en una nueva muestra de efectividad que valió el triunfo de los suyos.

También estuvo acertado Danilo Gallinari, saliendo desde el banquillo pero jugando minutos de titular. Con 18 tantos fue el segundo máximo anotador de su equipo, apenas 4 por encima de Young.

Y es que Young, viendo que era incapaz de meterla en una piscina, se dedicó a repartir juego. Terminó con 6-18 en tiros y un horrendo 0-7 en su especialidad, los triples. Sin embargo buscó siempre al mejor compañero y acabó con 11 asistencias y un +13 de diferencial en pista.

En los Lakers, sin un líder claro ante las ausencias de LeBron James y Anthony Davis, reinó el caos. Montrezl Harrell fue un seguro de vida para los de Vogel, tal y como lo ha sido todo el año. 23 puntos y 11 rebotes, anotando 10 de 13 tiros, para terminar como el más completo de los locales.

Sin embargo, estuvo lejos de ser suficiente. Dennis Schroder y Kyle Kuzma también lo intentaron pero apenas sumaron 24 puntos entre ambos. También Caldwell-Pope, negado de cara al aro, naufragó ante la defensa de Atlanta y terminó sin anotar.

Vogel buscó soluciones pero no encontró más que problemas. Todo lo que proponía encontraba respuesta en las filas de Atlanta y el tercer cuarto, con parcial de 22-12 en contra, no hizo más que confirmar algo que era obvio: ningún barco puede navegar sin su capitán.

El triunfo de anoche permite a Atlanta seguir escalando puestos, colocarse empatado con Miami en la cuarta posición del Este y empezar a coger aire tras un mal inicio de año. Los Lakers por su parte, tendrán que sudar tinta china para aguantar el tipo sin sus estrellas.