Aunque no se espera ninguna medida drástica, el entrenador del Girona, Juan Carlos Unzué, queda en una situación complicada después de perder el segundo partido consecutivo
El Girona volvió a perder su segundo partido consecutivo este domingo por la tarde en Oviedo, en un partido en el que la expulsión de Granell en el minuto 17 acabó siendo determinante, pero en el que los de Unzué ya se vieron por debajo en el marcador nada más empezar.
Este resultado, sumado a la derrota ante el Elche en Montilivi hace tan solo una semana vuelve a dejar tocado a la figura del técnico: Juan Carlos Unzué, que parecía haber dado con la tecla hace quince días, pero que ahora vuelve a quedar en una situación complicada.
Por el momento, no se espera que el club gerundense tome ninguna medida drástica, como mínimo hasta el próximo domingo, pero la realidad es que Unzué ha queda tocado después de perder ante Elche y Oviedo. El Girona ahora mismo está en mitad de la tabla clasificatoria y habiendo sumado 6 derrotas en 12 partidos, unos números realmente pobres para una plantilla diseñada para ascender de forma directa a Primera División.
La situación es complicada e inesperada para muchos, pero al mismo tiempo que reversible por la tremenda igualdad que hay en LaLiga Smartbank. Después de la duodécima jornada el equipo va a acabar a tres puntos del sexto clasificado.
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