Cientos de aficionados del Real Valladolid se lanzaron esta madrugada a las calles de la ciudad para celebrar el regreso de su equipo a La Liga Santander, tras pasar una temporada en la división de plata del fútbol español.
Un resultado en el que, pese a su victoria 3-0 frente al Huesca, los de Pacheta no han dependido de ellos mismos para asegurar el ascenso, sino que han tenido que esperar a los resultados del Eibar y del Almería para confirmar su retorno a primera.
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94 minutos de tensión, en los que las miradas a los móviles y los transistores eran constantes, ya que al Pucela no le bastaba con ganar, sino que necesitaba que uno de sus dos contendientes en el ascenso, Eibar o Almería, perdiera sus choques contra el Alcorcón y el Leganés, respectivamente.
El momento de mayor euforia, al menos en un bar frente al teatro Calderón, ha sido cuando el jugador del Alcorcón, Jorge Zarfino, ha marcado un gol al Eibar en el minuto 90, lo que ha sellado el ascenso del equipo castellano y leonés a Primera.
Una marea humana que se ha acercado hacia el centro de la ciudad, a pesar de que ni el equipo ni el Ayuntamiento habían previsto habilitar una zona para las celebraciones, hasta el punto de que el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, habían planteado trasladar las celebraciones para el lunes o el martes de esta semana.
No obstante, los coches han pitado a su paso por la céntrica plaza vallisoletana, mientras los furgones policiales de la Policía Nacional y de la Policía Municipal se acercaban a las inmediaciones de la plaza Zorrilla.
Esta plaza, lugar tradicional de celebración de los ascensos blanquivioletas, se vallaba a primera hora de la tarde del domingo para evitar accidentes graves, como el sucedido en 2007, aunque los aficionados, en su mayoría jóvenes, se han congregado con el paso de las horas.
“¡Pucela, pucela!”, “¡A primera!” o los clásicos “oés” se han podido oír, ante la atenta mirada de una veintena de agentes que aseguraban que la situación no se descontrolase y en un ambiente festivo.
Locura en Almería
En Almería también se contaron por miles los seguidores del cuadro local que saltaron a las calles nada más confirmarse el ascenso del equipo entrenado por Rubi. Los andaluces, además, consiguieron el billete a Primera como campeones de la categoría.
Aficionados del Almería festejan por todo lo alto el retorno del equipo a LaLiga Santander
La plaza de las Velas fue en este caso el escenario de la alegría de los seguidores rojiblancos. Ataviados con camisetas, banderas y bengalas, convirtieron la zona baja de la Rambla en una auténtica fiesta, coreando los nombres de los jugadores y técnicos del primer equipo, los auténticos protagonistas del ascenso.