La situación de Ander Capa en el Athletic no ha cambiado tras la llegada de Ernesto Valverde al banquillo rojiblanco. El defensa derecho del equipo bilbaíno, que desapareció de las alineaciones durante la etapa de Marcelino, se ha quedado fuera esta vez de la convocatoria de los leones para el encuentro de esta noche en Getafe. De Marcos, el lateral diestro titular, ha completado todos los compromisos ligueros disputados hasta la fecha.
Pese a que el pasado verano concluía su contrato, la directiva de Jon Uriarte decidió renovar a Capa. Parte de la afición de San Mamés había llegado a proclamar durante algunos encuentros de la pasada campaña el grito de “Capa, askatu” (Capa, libertad) al entender que la suplencia del bravo defensa rojiblanco obedecía a una imposición por parte del club, presidido entonces por Aitor Elizegi con Rafa Alkorta como director deportivo, al técnico asturiano al no haber querido aceptar en su día la propuesta para prorrogar su contrato como león. Tanto la institución como el propio Marcelino insistieron repetidamente en que Capa no jugaba por decisión técnica del propio míster.
Con la llegada de Valverde al banquillo de San Mamés, la situación se mantiene igual. Capa solo ha participado una vez a lo largo de los nueve encuentros ligueros que lleva disputados el Athletic. Su concurso se limitó a entrar en el minuto 90 del choque en San Mamés frente al Valencia, disputado el pasado 21 de agosto, junto a Morcillo en sustitución de los hermanos Williams. Su anterior presencia a ras de césped se remontaba al 15 de mayo del presente año, trigesimoséptima jornada de la pasada Liga, cuando reemplazó a Iñaki Williams en el minuto 87 del choque casero ante Osasuna.
Athletic y Capa alcanzaron a primeros de julio un acuerdo para suscribir un nuevo contrato que se prolongará hasta 2024, pero con la campaña 2023-24 sujeta a determinadas condiciones. “El club se reserva la opción de dejarlo en una sola temporada si el futbolista no ha cumplido durante la campaña 2022-23 una serie de objetivos”, explicaban entonces desde la propia institución. Institución que remarcaba además que el defensa había aceptado finalmente las condiciones económicas propuestas por la entidad dirigida por Jon Uriarte basadas “en una estructura salarial con un componente de variable, que estará vinculado al cumplimiento tanto de objetivos individuales como de resultados colectivos”.