Giovanni Van Bronckhorst, entrenador del Glasgow Rangers, cayó con su equipo (1-1, 5-4 en los penaltis) ayer ante el Eintracht Frankfurt en Sevilla en la final de la Europa League. En rueda de prensa posterior al partido admitió que algunos de sus jugadores no querían tirar los penaltis.
“Jugar una final europea y perderla siempre duele. Haces todo lo posible por ganarla, pero se decide en los penaltis, y es una lotería. No nos salió bien pero no culpo a mis jugadores después de todo lo que dieron. Fue un partido muy igualado. Es una gran decepción. Sé lo que es, perdí una final de la Copa del Mundo, el partido más grande que puede existir. Pero siempre sigues adelante”, empezó diciendo.
Sobre el lanzamiento errado de Ramsey, dijo que “habíamos preparado bien los tiros a puerta. Algunos jugadores se sienten cómodos lanzándolos y algunos quisieron lanzarlos, pero otros no. Teníamos nuestra lista, pero tuvimos que ajustarla en base a los suplentes. Aaron (Ramsey) está decepcionado, pero él asumió la responsabilidad de lanzar. Podía marcar o fallar, pero para tirarlo prefiero jugadores que se sientan cómodos”.