“El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, explicará hoy mismo a la Cámara de Diputados el alcance del plan presentado por el presidente”, destaca Milenio.
“Templo Mayor” en Reforma:
“Eso de eliminar los aguinaldos de la alta burocracia suena más bien a ocurrencia que a realidad porque nomás de entrada
se trata de un derecho y una prestación legal de todos los burócratas sean de base o confianza.
Es decir habría que modificar la Ley Federal de tos Trabajadores al Servicio del Estado y luego esperar la ola de amparos.
LO PEOR es que destruir el servicio profesional en la administración pública no parece ser la mejor ruta para sacar al país del hoyo pues oootra vez es querer hacer crecer la economía ahorrando en chicles”.
“Frentes Políticos”, en Excélsior:
“El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que “estamos haciendo hasta lo imposible para mantener el compromiso de no aumentar la deuda pública”. En su informe al pueblo de México, explicó que, aun con la depreciación del peso, estimada en más de 23% de lo que va del gobierno por la crisis sanitaria y los efectos en la economía mundial, se hará “lo imposible” para no incrementar la deuda. Y contestando a sus más acérrimos críticos, quienes sugieren que el gobierno tome deuda o deje atrás los proyectos insignia, dijo que, en cambio, siguen en marcha la construcción del aeropuerto de Santa Lucia, Felipe Ángeles, la rehabilitación de las seis refinerías y la construcción de la de Dos Bocas. Ningún virus podrá con los proyectos de un México mejor. Todos estamos metidos en este barco: quédate en casa y triunfaremos”.
“La Feria”, de Salvador Camarena, en El Financiero:
“Es harto ociosa la pregunta de si va a renunciar Arturo Herrera o no a la Secretaría de Hacienda. Porque la respuesta ya la sabemos. Y ésta no depende de ese buen funcionario que ha resultado el hidalguense. No. El acertijo se resuelve en la historia, y en un solo lugar: la mente del Presidente de la República. Dicho de otro modo y para no darle vueltas: Arturo Herrera se irá como se fueron Carlos Urzúa y Gerardo Esquivel. Es decir, cuando Andrés Manuel López Obrador lo deje sin margen de maniobra. En ese momento, que parece muy cercano si me preguntan a mí, pero que tampoco debería ser irreductible, Herrera seguirá los pasos de sus amigos Urzúa y Esquivel, y nosotros estaremos a merced de un escenario gris, muy gris. El de la confirmación de que AMLO cree que no necesita ayuda profesional para manejar las finanzas de un país complejo y emproblemado como es el nuestro, y peor: en medio de una crisis mundial”.
“Telecomunicando” de Irene Levy, en El Universal:
“Ya lo había prometido en la última comida de la CIRT, López Obrador anunció que reduciría los tiempos oficiales, así lo escribí en mi columna publicada en EL UNIVERSAL el 18 de noviembre pasado en la que también dije que de nada beneficiaría a los concesionarios. Pero gran revuelo causó su mensaje de la mañana del viernes, en la que dijo que ese mismo día firmaría “un acuerdo para devolver los tiempos oficiales a estaciones de radio y tv, porque la industria está pasando por un mal momento y nosotros no podemos darles dinero para publicidad como era antes y se va a reducir aún más, con esta medida ellos van a poder comercializar esos tiempos para mantener el trabajo de muchos”.
“Trascendió”, en Milenio:
“El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, explicará hoy mismo a la Cámara de Diputados el alcance del plan presentado por el presidente Andrés Manuel López Obrador para enfrentar la emergencia económica derivada de la crisis sanitaria y la caída del precio del petróleo. Aunque el diálogo será por videoconferencia, el debate será intenso, pues la 4T ha dejado claro que no habrá de rescates ni exenciones fiscales, mientras el sector empresarial no quedó satisfecho con el anuncio e insiste en un acuerdo nacional razonable que permita salvar salarios, empleos y, en general, la planta productiva”.